La actividad denominada “Por el futuro que queremos” fue detenida cuando se acercaba a la avenida Libertador por funcionarios de la guardia y policía nacionales, lo que desató algunos choques entre manifestantes que lanzaban piedras y fuerzas del orden, que respondieron con gases lacrimógenos, chorros de agua y la detención de media docena de jóvenes
CARACAS — Policías antimotines y agentes de la Guardia Nacional dispersaron con gases lacrimógenos y balas de goma una marcha convocada por estudiantes «por el futuro que queremos», en el marco de dos meses de violentas protestas antigubernamentales.
La manifestación contó con el respaldo de dirigentes opositores duros al presidente Nicolás Maduro tras negarse a participar en el diálogo entre el gobierno y miembros moderados de la oposición.
Mientras estudiantes mediaban y formaban cadenas humanas para proteger a agentes de la Guardia Nacional de agresiones, los manifestantes arrojaron piedras y otros objetos a los agentes que cortaron el paso de la protesta, que tuvo lugar al cumplirse dos meses de los violentos incidentes registrados en la capital venezolana tras una multitudinaria marcha de universitarios y opositores. Aquella marcha fue encabezada por la ahora exdiputada María Corina Machado y el dirigente opositor Leopoldo López, detenido desde el mes pasado en una cárcel militar por su presunta responsabilidad en los hechos.
Protestas no cesarán
El movimiento estudiantil, principal promotor de las protestas callejeras, ratificó el viernes que independientemente de los diálogos los universitarios, las manifestaciones continuarán «de manera pacífica, pero con contundencia». Los estudiantes, que portaban pancartas en las que se podía leer lemas como «Resistencia» y «Maduro Dictador», exigen respuestas a la crisis económica social, a la alta criminalidad y piden respeto a los derechos de reunión, expresión y protesta.
Estaba previsto que los opositores recorriesen calles y avenidas desde tres puntos de la ciudad hasta la céntrica plaza Venezuela, localizada en el municipio Libertador, el único de los cinco municipios capitalinos bajo el mando de un alcalde oficialista y que es asiento de los poderes públicos venezolanos.
Desde tempranas horas, cientos de agentes de la Guardia Nacional y la Policía Nacional se apostaron en los principales accesos a la plaza. Luego de algunos forcejeos con los cuerpos de seguridad, la mayoría de los manifestantes se retiró pacíficamente rumbo al este de la capital.
¿Y el diálogo?
«Rechazamos contundentemente los atropellos y agresiones. Este gobierno le tiene miedo a los estudiantes que valientemente se mantienen enfrentando pacíficamente a la dictadura», dijo el alcalde mayor del Distrito Metropolitano de Caracas, Antonio Ledezma, que encabezó un tramo de la marcha y que se cuenta entre los más acérrimos críticos del proceso de diálogo con el gobierno, argumentando que no están dadas las condiciones para ello.
«Cómo se puede hablar de diálogo cuando se impide la protesta pacífica, se reprime una marcha pacífica, se criminaliza la disidencia», agregó.
Machado denunció que miembros de la Guardia Nacional se apostaron en los alrededores de la plaza Venezuela, impidieron la instalación de una tarima en el lugar y «se llevaron detenidos a estudiantes» sin una causa justificada.
El abogado Alfredo Romero, directivo de la ONG Foro Penal Venezolano, dijo a la prensa que al menos una decena de personas fue detenida durante los hechos.
Chavistas hoy
en la calle
El Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) convocó para este domingo a una concentración ante la sede del Ejecutivo, precisamente para conmemorar la contraofensiva cívico militar que hace doce años revirtió el golpe y reinstaló en el sillón presidencial a Chávez.
«El pueblo recordará el golpe del 11 de abril de 2002 y a su vez celebrará cómo la fuerza popular logró el 13 de abril revertir la acción de los golpistas, rescatar la democracia y devolver a Miraflores al presidente legítimo», anunció el dirigente del PSUV y diputado Darío Vivas