El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, restituyó hoy a Gustavo Petro como alcalde de Bogotá, un mes después de su destitución, al acatar la sentencia emitida este martes por un tribunal que ordenó cumplir con las medidas cautelares otorgadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
«Las leyes, los jueces, me ordenan restituir al alcalde Petro y he firmado el decreto correspondiente para que se restituya. Esta decisión es en cumplimiento de la ley, no tengo alternativa», dijo.
Santos confesó que se trata de una «decisión controvertida» que algunos no compartirán, pero insistió en que su «obligación» es «cumplir con la ley» y respetar «la independencia de los poderes», ya que en caso contrario «la democracia comienza a vulnerarse».
El presidente destituyó a Petro el pasado 19 de marzo al acatar una orden de la Procuraduría (Ministerio Público) que el 9 de diciembre de 2013 argumentó que el alcalde había cometido graves fallas durante la implantación de un nuevo modelo de recolección de basuras un año antes.
Esa misma sentencia de la Procuraduría inhabilitó por 15 años a Petro para ejercer cargos públicos.
Un día antes de que la destitución se hiciera efectiva, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos había otorgado medidas cautelares para evitar que Petro saliera de la Alcaldía, un hecho que no afectó a la decisión del presidente y que ahora ha forzado su regreso al cargo.
El lunes, Santos nombró como alcaldesa encargada a María Mercedes Maldonado, del mismo partido que Petro, en reemplazo del ministro colombiano de Trabajo, Rafael Pardo, quien ocupó el cargo también como encargado desde el 19 de abril.
Con la vuelta de Petro al cargo, revive el proceso de referendo revocatorio convocado en su contra que se había suspendido a raíz de la destitución. EFE