El cadáver de Pedro López, de 63 años de edad, fue localizado en el interior de la empresa metalpurgica donde trabajaba como vigilante, en el centro industrial San Isidro, en Petare. La madrugada del sábado, delincuentes ingresaron para cometer un robo y lo asesinaron.
Un amigo de la víctima fue quien lo halló sin vida cuando llegó a la empresa a las 8:00 de la mañana. Se presume que el vigilante fue sorprendido mientras dormía y luego de maniatarlo y amordazarlo, lo golpearlo hasta causarle la muerte por un edema cerebral.
La persona que lo encontró llegaba todos los sábados a buscarlo, pero en esta ocasión se extraño de ver el portón abierto. Cuando lo llamó a gritos no le respondió, ´por lo que decidió entró a revisar. Se presume que los antisociales pretendían obtener de López información pero al no conseguirlo lo mataron y huyeron sin robar nada.