*** Semblanzas de Luis María Frómeta Pereira
Asistimos a la clausura de la temporada del maravilloso musical bibliográfico del maestro Billo Frómeta: “Las canciones de Billo” , en el que pudimos revivir un pasado glorioso de la música popular venezolana del prodigioso Luis María Frómeta Pereira (Billo) y que encierra un período musical que el mismo inicia con su llegada a Venezuela en el año el 31 de diciembre del año 1937.
Características del espectáculo
A nuestro entender, se trataba de revivir la figura del maestro Billo a través del tiempo con sus composiciones y sus arreglos musicales y de traer al presente la impactante personalidad del artista que supo ganarse el corazón de un pueblo. Pudimos escuchar anécdotas de su vida y sus amores contadas por su hija Magdalena Frómeta, quien supo imprimir pasión y temple a cada una de sus palabras cuando hacía remembranzas de esas historias vividas por su padre, pero además engalanó el escenario con su maravillosa voz, interpretando algunas canciones del repertorio de Billo.
Creemos que haber escuchados a Magdalena y a los estupendos cantantes y músicos que la acompañaron, Daniel Jiménez, Juan Manuel Blanco, Jesús Rafael Pérez y Freddy Martínez (en la percusión), por momentos se podría reconstruir la historia musical de la mitad de Siglo XX y a la vez sentir el revivir de una época en nuestras almas.
Igualmente merecen nuestra admiración las tres jóvenes cantantes invitadas de honor a participar en tan impactante musical, las cuales tuvieron participación especial, alternándose en cada una en las funciones llevadas a cabo, ellas son: Laura Guevara, Selena Lovera y Nereida Machado.
Libreto, dirección y producción
Capítulo aparte merece el libreto y la dirección escénica presentada por el profesor Federico Pacanins, quien volvió a demostrar que el teatro, además de ser tratado con talento, debe transformarse en el sentimiento de la realidad que él director lleva al escenario. En las dos horas que dura el espectáculo el público se siente parte del mismo y premia a cada momento los movimientos y las acciones de los artistas con aplausos que media la satisfacción de haber acudido a ver un espectáculo que se llevó a sala llena.
Pensamos que la dupla de Magdalena Frómeta, en la producción y en la interpretación de las canciones de su padre y la de Federico Pacanins en la dirección escénica y la unión de todos los que intervinieron en el montaje de “Las Canciones de Billo” debe repetirse y de hecho así ha de ser ya que al finalizar el espectáculo el profesor Pacanins anunció que tendremos otro maravilloso encuentro con Billo y sus canciones, en esta oportunidad con su música navideña el próximo 4 de diciembre.
Semblanzas
Nace el 15 de noviembre de 1915, en la ciudad de Santo Domingo, República Dominicana, hijo del abogado José María Frómeta y doña Olimpia Pereira de Frómeta pero es la ciudad de San Francisco de Macoris, en el interior de la República Dominicana, es precisamente en esa ciudad donde estudia su primaria y a la vez inicia a recibir sus iniciales lecciones de teoría y solfeo. Es importante destacar que la música era debía estudiarse obligatoriamente y el pequeño Luis María tenía que asistir diariamente a la academia antes de entrar a clases.
Generalidades de los
comienzos del Maestro Billo
Sus dos grandes compañeros, en este tiempo, eran dos prestigiosos músicos, Simón Damirón y Rafael Minaya; quienes más adelante se harían inseparables amigos y compañeros de proyectos musicales, recién había cumplido los 15 años es fundador y primer director de la Banda del Cuerpo de Bomberos de Ciudad Trujillo, una banda que contaba con 48 músicos, un hecho que la ha de conducir a ser miembro fundador de la Orquesta Sinfónica de Santo Domingo Se une a Simón Damirón (pianista y estudiante de ingeniería), su hermano Fernando Frómeta, Ernesto Chapusseaux (estudiantes de medicina) y Coronado. Fundan la orquesta de baile Santo Domingo Jazz Band, con Damirón como director. Se influencian con las orquestas predominantes en la época: Fletcher Henderson, (pionero del género “Big Band” y el Swing), Casino de la Playa (de Cuba) y Glen Miller Sin pensarlo le surge un contrato a la Santo Domingo Jazz Band para amenizar las fiestas de año nuevo en la sala de baile Roof Garden del Hotel Madrid, en pleno centro de Caracas, frente a la Plaza Bolívar
Desarrollo profesional
Al concluir la secundaria decide comenzar sus estudios de medicina en la Universidad de Santo Domingo, con el fin de complacer a su padre que quería que su hijo se convirtiera en un notable médico, sin embargo el destino le tenía preparado otra cosa al Maestro Billo, que en realidad se llama Luis María Frómeta Pereyra, y era el de convertirse en uno de los más notables músicos del Siglo XX de América.
Se viene a Venezuela cuando tenía solo 22 años, quizás buscando la libertad que el sanguinario dictador Leónidas Trujillo, conocido mundialmente con el apodo de Chapita, le despojó a República Dominicana. El dictador Trujillo sentía una obsesiva y enfermiza posesión del poder, le dio hasta por cambiar el nombre de la capital o de todo lo que le pareciese atractivo de Santo Domingo, por el de Ciudad Trujillo, al punto de que, para otorgarle el permiso a la banda, se le puso como condición que el nombre fuera cambiado a Ciudad Trujillo Jazz Band. Los jóvenes músicos accedieron a regañadientes, pero que al llegar a Venezuela cambiaron de nombre por tal motivo no pudo regresar a su patria si no a la muerte de tan detestable dictador de América ya que ni siquiera se le dio permiso de entrada al morir su muy querida progenitora y Luis María Frómeta Pereira debió vivir con ese terrible dolor en su alma.
(continúa el próximo domingo 11 de mayo)
Corolario
Queremos destacar en forma total y meritoria a la agrupación musical Los Retropicales y a los directores musicales del evento los maestros Jesús Rafael Pérez y Daniel Jiménez por su valioso aporte en el lucimiento de tan magno y destacado musical “Las canciones de Billo”
Un domingo con Salomón
Salomón Benshimol R.
e-mail: sbenshimolyahoo.com