Presuntos militantes del grupo islamista Boko Haram secuestraron durante la madrugada a ocho adolescentes de una localidad cercana a uno de sus bastiones en el noreste de Nigeria, dijeron el martes residentes y la policía.
El secuestro de las niñas, de entre 12 y 15 años, se produce luego del rapto de más de 200 estudiantes por el movimiento militante islámico el mes pasado, que ha amenazado con venderlas como esclavas.
Lazarus Musa, un residente de la localidad de Warabe, dijo a Reuters que hombres armados habían abierto fuego durante la incursión.
«Había muchos, todos llevaban armas. Llegaron en vehículos pintados con el color del Ejército. Comenzaron a disparar en nuestro pueblo», dijo Musa por teléfono desde el pueblo ubicado en la montañosa zona de Gwoza, la principal base de Boko Haram.
Una fuente policial, que pidió no ser identificada, dijo que las niñas fueron llevadas en camiones junto con ganado y alimentos saqueados.