Una comisión integrada por vecinos de distintas parroquias del municipio Libertador acompañados por representantes del movimiento estudiantil acudieron a la Fundación Fondo Nacional de Transporte Urbano (FONTUR) para rechazar el aumento del pasaje de transporte público en un 40%, al considerarlo inconsulto y un golpe al bolsillo del pueblo.
Asimismo exigieron que se instalen una verdaderas mesas de diálogo donde caraqueños, estudiantado, transportista y Gobierno nacional decidan una equilibrada tarifa, tomando en cuenta las opiniones de todos.
Carlos Julio Rojas, coordinador del Frente en Defensa del Norte de Caracas, señaló que en ningún momento el Gobierno nacional consulto a los caraqueños el aumento del pasaje de 40%, el cual significa un impacto importante en el escaso salario del pueblo.
“El sueldo mínimo apenas fue aumentado en un 30% y solo las nuevas tarifas del pasaje se la comen, muchos ciudadanos tendríamos que pagar diario más de 30bs. Esto no es una medida revolucionaria sino neoliberal que fue tomada unilateralmente por el estado”, dijo.
Rojas explicó que la mala calidad del servicio no está equilibrada con los altos costos que ahora el pueblo tendrá que pagar para trasladarse en el transporte público, pagando 7,50 ahora y 8,50 bsf a partir de agosto.
“El andar en autobús en un viacrucis porque además de la inseguridad vives la incomodad de asientos rotos y malos tratos de conductores, es deber de Fontur abastecer a los transportes de condiciones mínimas para funcionar. Pagamos un dineral en pasaje pero recibimos mala calidad de vida en el transporte público”.