Afectados indican que además de la sequía, esta situación se debe al «derroche y uso frívolo» del servicio por parte de la comunidad.
Alrededor de tres mil colegiales se ven involucrados ya que no pueden acudir a sus aulas por la ausencia del vital líquido
Con motivo de la paralización del servicio de agua, desde el pasado miércoles, muchas instituciones de educación inicial, media y diversificada, decidieron trabajar media jornada, a fin de garantizar la salubridad de las áreas de baño para el uso de los menores, mientras que otras escuelas y liceos cerraron por completo sus puertas hasta el próximo lunes, cuando el suministro del vital líquido sea regular.
El equipo reporteril de La Voz recorrió diversas instituciones, ubicadas en la parroquia La Candelaria, donde pudo constatar esta situación. En los colegios Maripérez, de educación inicial y Dora Bargueño, de etapa especial, las clases se desarrollaron hasta las 12 del mediodía, hora prudencial para que los representantes pudieran buscar a los menores. Todo ello para evitar que los baños se colapsen por falta de agua.
Otros centros educativos trabajaron con normalidad, debido a que contaban con tanques de agua que les permitirá sobrellevar la falta de agua, sin embargo, los directivos expresaron que de extenderse la paralización del servicio tendrán que suspender las actividades.
A media jornada
Migdalia Muñoz, directora del colegio Dora Bargueño, indicó que, “esta es una medida preventiva que hemos utilizado diversas instituciones, además la asistencia ha sido bastante baja, de una matrícula de 552 alumnos sólo 223 acudieron a las aulas durante la semana”.
Por su parte, a algunas instituciones les tocó paralizar las actividades escolares porque no cuentan con un tobo de agua. Entre los que cuentan, están el preescolar Los Cisnes, el colegio católico Patronato San José de Tarbes y el Salesiano.
“¿Cómo se labora
sin agua?”
Las escuelas estadales también se sumaron al cese parcial de actividades, a diferencia de las que cerraron sus puertas por completo. Tal es el caso del colegio, “Patronato San José de Tarbes”, donde suspendieron sus actividades porque se les agotó el agua suministrada en el tanque, “nos vimos en la necesidad de cerrar las puertas del colegio porque se nos agotaron los recursos del servicio, y dos veces por semana que nos envían el agua no alcanza para llenar por completos los tanques”.
Así lo dio a conocer María Gabriela Márquez, profesora del colegio, quién agregó que, “una cisterna pequeña nos cuesta entre 1.500 Bs, y no llena por completo los tanques del colegio y apenas alcanza para limpiar en el momento. Y sin agua como se labora, cuando los baños colapsan y no se puede disponer del servicio del comedor”.
El templo también
está en apuros
Bruno Masiero, párroco de la iglesia Maria Auxiliadora, informó que, “el problema del agua también está afectando la parroquia, en los últimos tres días no ha llegado ni una gota y ya se nos vaciaron los tanques. Nos toca comprar agua potable, cargar con tobos de vecinos que nos regalan agua y en última instancia nos tocó utilizar el agua de la fuente para uso sanitario”.
Agregó que las autoridades no han avisado el porque del racionamiento, “ellos no dieron aviso de que no habría agua. Nosotros sabemos que éstos fenómenos son inesperables, porque si no llueve hay que ver cuáles soluciones se pueden tomar. Porque en las instituciones hay que ser muy preventivos”.
Hasta el en Ministerio
están sin agua
Vecinos del sector La Candelaria, aseguran que se han visto bastante afectados con este racionamiento del servicio, “hace tres día no tenemos agua en San Bernardino, todo es cronometrado, tenemos que estarle haciendo cacería al agua para levantarnos a llenar tobos, en mi caso estoy utilizando cosas desechables porque con que agua lavo un plato”, así lo dio a conocer Elizabet de Rodríguez, habitante de la zona.
Por su parte, José Barrera, miembro de la policía de Caracas, informó que no sólo son viviendas e instituciones educativas afectadas, sino que hasta ministerios están paralizados, “el Ministerio de Interior y Justicia, que lo tenemos aquí mismo en la zona, cerró sus actividades porque no tienen agua tampoco. Este racionamiento se esta pronunciando fuertemente en la zona. Hay que esperar que comunicado anuncian con respecto a esta medida”.
Habla Min-Ambiente
“Hoy reconocemos que no podemos captar agua de este embalse lo que significa que no dejaremos sin agua a Caracas, a Los Valles del Tuy ni a los Altos Mirandinos”, afirmó Miguel Leonardo Rodríguez, ministro para el Poder Popular para el Ambiente. También lamentó que los estudios meteorológicos vaticinaron que iba a llover en abril, no ocurrió y por eso no se puede abastecer al pueblo.
Por otra parte, se conoció que, El embalse Lagartijo tardará 2 años para llegar a su nivel más óptimo, porque presenta un bajo porcentaje de almacenamiento por lo que es una situación crítica, “el embace presenta lo que llamamos nivel muerto porque no se puede captar agua y no podemos recoger los 3500 litros de agua por segundo para abastecer”.
Shirley Zambrano