En horas de la tarde y principios de la noche estuvo cerrada la Avenida Principal de La Urbina a la altura del Central Madeirense por una protesta de transportistas en contra de una invasión a un terreno ubicado en la calle 3A de La Urbina.
La protesta comenzó aproximadamente a las 4 pm. Los manifestantes tomaron la intersección completa de la Principal de La Urbina y la Calle 2A. Solo los motorizados podían pasar.
Según comenta Edilberto Asensio, uno de los transportistas afectados, los invasores han amenazado con tomar el único terreno del sector que aún no ha sido invadido, el cual está justo detrás del Central Madeirense. El conductor, que tiene 15 años guardando su unidad de transporte en el terreno invadido esta mañana, explica que los invasores dicen ser damnificados, pero él asegura que no lo son. «Lo que están es extorsionando a la gente, son revendedores (de parcelas)».
Asensio se declara «chavista, pero no madurista», y solicita que Venezolana de Televisión (VTV) se acerque al lugar a cubrir lo que está pasando. Este transportista, desde la protesta, al percibir que se acerca la noche y no va a tener dónde guardar su autobús, se preguntó: «¿Será que nosotros vamos a tomar este sector como estacionamiento?» Se refiere a la intersección que tenían tomada como medida de protesta.
Aproximadamente a las 6:45 pm la protesta fue disuelta, y los transportistas se dirigieron a guardar diligentemente sus unidades en el único terreno que ahora les queda para tal fin.
Los manifestantes explican que en ese sector de La Urbina, entre las calles 2 y 3, por donde está la Misión Vivienda, originalmente había 4 terrenos en los cuales estacionaban sus unidades de transporte público. Dos de esos terrenos fueron invadidos hace varios meses y un tercero es el que fue invadido esta mañana. Solo queda uno, que es el que los manifestantes habrían amenazado con invadir esta noche.
Juan Manuel Oca, propietario del terreno invadido, explica que esta invasión afecta a 160 transportistas que guardan sus vehículos entre ese terreno y el que aún no ha sido invadido.
Otra persona que participaba en la manifestación y que prefirió no ser identificada, aseguró que en la calle en la cual invadieron el terreno, y donde están los otros dos terrenos invadidos previamente, en los últimos meses «ha habido 7 muertos. Ahí atracan, matan. Es horrible lo que estamos viviendo». Otro manifestante relató que antes la calle era tranquila, que inclusive podían jugar dominó en la bomba de gasolina del sitio. Pero ahora la inseguridad, producto a su juicio de quienes invadieron hace meses los otros terrenos, les impide estar tranquilos en el sector.
Los transportistas se preguntan cómo van a hacer para guardar sus vehículos durante las noches.
Daniel Doffiny