Transportistas aseguran que “autoridades sólo han tenido excusas” para enfrentar “la delincuencia desatada en Filas de Mariche”
A tempranas horas de la mañana de ayer, fue secuestrado un conductor de la cooperativa de conductores de la Línea Miranda, que presta servicio entre Filas de Mariche, San Isidro, Universidad Santa María y Petare.
Según narraron fuentes extraoficiales, dos antisociales abordaron la unidad de transporte colectivo a la altura de La Lagunita, en dirección Petare, portando armas de fuego. Posteriormente procedieron a despojar a los pasajeros de sus pertenecías, para luego llevarse retenido al conductor, hijo de uno de los socios de la línea, dejando la unidad abandonada.
La banda delictiva que supuestamente estaría involucrada en el hecho, con anterioridad se dedicaba a extorsionar a los transportistas que hacen vida en la zona, y al éstos últimos negarse a seguir pagando la llamada “vacuna”, los antisociales emprendieron represalias contra ellos.
Hasta el momento se desconoce el paradero del conductor secuestrado, esto según reportes de fuentes que prefirieron mantenerse anónimas, que agregaron que los captores exigen dos millones de bolívares para liberar al transportista.
Sin respuesta
Cabe destacar que este populoso sector del municipio Sucre ha sido victima de un repunte en la delincuencia en el último mes, dejando como saldo al menos 10 personas muertas; entre los que se cuentan los casos de un avance y un colector de la antes citada asociación de conductores de transporte público.
Según dirigentes de las líneas de transporte que hacen vida en Filas de Mariche, que prefirieron reservarse su nombre, han sostenido en varias ocasiones reuniones con representantes de las policías de Sucre y Miranda, así como de la PNB (Policía Nacional Bolivariana) y la Guardia Nacional; de las cuales no han obtenido respuestas satisfactorias para el problema de la seguridad.
“Cada uno tiene una excusa diferente para no patrullar en Filas de Mariche”, dijo uno de los dirigentes de la comunidad. “Que no tienen personal, que no tienen asignado este cuadrante en el patrullaje inteligente y pare de contar, y mientras tanto la delincuencia sigue desatada”. A consecuencia de esto, los profesionales del volante no descartan tomar acciones de protesta.
Caos vehicular en
la Redoma de Petare
En rechazo a la invasión de un estacionamiento en La Urbina que atendía a cerca de 200 transportistas de distintas líneas que hacen vida en Caracas, estos aparcaron sus vehículos a lo largo de la Redoma de Petare, las calles 2 y 3 de La Urbina y en las cercanías de el Mercado Terminal; lo cual ocasionó un fuerte congestionamiento vehicular en las zona
Luís Guillermo Valera
