El gobierno venezolano pagará más de 2.100 millones de dólares en deudas a importadores y empresas extranjeras, anunció el vicepresidente económico Rafael Ramírez en momentos en que el país atraviesa un agudo desabastecimiento por impagos a importadores y prestadores de servicios, estimados en USD 14.000 millones.
En un país bajo estricto control de cambios desde 2003 y donde el gobierno ejerce el monopolio de las divisas, la sequía de dólares –pese a los altos precios del petróleo– generó una situación de escasez permanente.
Las empresas importadoras y suministradoras de servicios afirman que el gobierno les adeuda 14.000 millones de dólares, que a su vez ellas deben a sus casas matrices o proveedores extranjeros que les han cortado los créditos.
Para surtir su despensa, el venezolano de a pie se lanza cotidianamente a un recorrido de supermercado en supermercado para, luego de realizar filas por horas, obtener –si tuvo suerte– leche uruguaya, carne nicaragüense, pescado chileno, café brasileño, harina canadiense, toallas desechables colombianas o papel higiénico estadounidense.
En paralelo, los centros comerciales lucen con tiendas de lujo vacías y muchos venezolanos se levantan en mitad de la noche para buscar en Internet si alguna aerolínea puso a disposición un puñado de pasajes.
Desajustes económicos
Desde que asumió hace 13 meses el presidente Nicolás Maduro –heredero político de Hugo Chávez– ha evitado medidas impopulares, como recortar el gasto público para reducir un déficit estimado en 15% del Producto Interno Bruto, y rechazó enfáticamente al menos una decena de veces la posibilidad de una devaluación.
Maduro, que defiende a capa y espada lo que define como un “modelo de transición al socialismo”, acusa de los males a la “guerra económica de la burguesía parasitaria”.
De todas formas, cuando en enero el dólar llegó a cotizar doce veces más en el ilegal mercado paralelo que en el oficial, el gobierno realizó un ajuste encubierto desdoblando el tipo de cambio en tres diferentes para distintos sectores de la economía: 6,30 bolívares por dólar, 10 y 50. Además, persiste el ilegal paralelo que se acerca a 70 bolívares por dólar.
La semana pasada la petrolera estatal había anunciado la emisión de bonos por 5.000 millones de dólares, recursos que los analistas previeron que sean utilizados para las finanzas nacionales y no de la compañía. Ya en noviembre Pdvsa había emitido títulos por 4.500 millones de dólares.
La falta de dólares obedece a la casi nula producción local, la importación de casi todo lo que se consume y a la dependencia sobre el crudo como fuente única de divisas.
Aunque se afirma que Pdvsa exporta casi 100.000 millones de dólares al año, la cifra es aproximativa porque la empresa todavía no difundió su informe de gestión auditado de 2013.
Lo que sí se confirma es que las reservas del Banco Central se desplomaron en un tercio durante 2013 al caer de 30.000 millones a poco más de 20.000 millones de dólares.
AFP/ Marcelo Daniel Brusa