Stalin León arribó llegó la semana pasada al Aeropuerto Internacional de Miami (MIA) en un vuelo de la aerolínea Santa Bárbara Airlines que procedía de Caracas.
León, de 42 años, presentó su pasaporte venezolano a los inspectores de inmigración, junto con una declaración de aduanas en la que dijo que no llevaba más de $10,000 en efectivo.
Sin embargo, el inspector de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) que lo recibió tenía sospechas sobre la declaración de León. Lo sacó de la línea regular de inmigración y lo envió a una sala para ser interrogado.
Ahí es donde León reveló detalles que en última instancia condujeron a su arresto y a la detención de otros cinco venezolanos que viajaban con él. La cantidad que los inspectores de CBP retuvieron a los venezolanos fue de más de $83,000.
El incidente fue el más reciente caso de presunto contrabando de dólares desde Venezuela y otros países de América Latina. Varios viajeros venezolanos y de otros países latinoamericanos han llegado en épocas recientes en posesión de dólares en su ropa o equipaje en un intento por evadir los controles de cambio en Venezuela y otros países donde los gobiernos buscan limitar la cantidad de efectivo en dólares que pueden transportar sus ciudadanos al extranjero.
Funcionarios de la Policía de Inmigración y Aduanas (ICE) dijeron que no podían comentar sobre el caso, ya que todavía está bajo investigación.
El abogado de León en Miami, Joel DeFabio, defendió a su cliente al que calificó como un empresario.
“El señor León, al igual que muchos de mis otros clientes, es un hombre de negocios legítimo que cometió un error de juicio al no declarar el dinero que transportaba”, dijo DeFabio.
“Es lamentable que esté ahora en una prisión federal con cargos criminales graves en su contra, producto de la situación política, la regulación bancaria y la devaluación de la moneda local. En esta era de comercio mundial con dólares estadounidenses, muchos de nuestros clientes se topan con esta realidad financiera difícil al tratar de hacer negocios a través de las fronteras”.
El incidente en el MIA tuvo lugar el pasado 11 de junio, cuando León habló con funcionarios de control de pasaportes sobre los dólares que transportaba.
Dinero en los bolsillos
Una denuncia penal presentada en el tribunal federal de Miami por un agente especial de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI), una unidad de ICE, detalló lo sucedido.
Al ser interrogado, León reconoció que llevaba $9,875 en los bolsillos de su pantalón y que por eso puso en su declaración de aduanas que no tenía más de $10,000 en efectivo en su persona.
Pero luego reveló a los investigadores que lo interrogaban que no viajaba solo. “León dijo que viajaba con otros cinco pasajeros”, de acuerdo con la denuncia penal. “Los funcionarios de CBP lograron identificar positivamente a los demás pasajeros”.
En la denuncia penal, el agente especial de HSI identifica a los pasajeros con iniciales: EV, JA, OR, JZ y GR.
Según la denuncia, tres de los pasajeros —JA, JZ y GR— ya habían salido del área de control de pasaportes, pero todavía se encontraban dentro de la terminal aérea esperando a que saliera León. Fueron detenidos y llevados de nuevo a control de pasaportes para ser interrogados, indica la denuncia penal. Los otros fueron detenidos dentro de control de pasaportes e interrogados también.
La denuncia dice que OR reconoció en su declaración de aduanas que llevaba más de $10,000 en efectivo. Explicó a los investigadores que traía $18,820 en los bolsillos de su pantalón.
Los funcionarios de CBP encontraron $13,380 en los bolsillos de los pantalones de EV. La denuncia penal dice que EV también reveló que había sido León el que les dio los dólares a él y los otros viajeros antes de que el vuelo partiera de Caracas y que no tenían más remedio que obedecer porque León era su jefe.
Con información de El Nuevo Herald