El Colegio Nacional de Periodistas de Venezuela calificó de “tergiversación y manipulación” de la profesión de comunicador social el premio de periodismo Aníbal Nazoa, otorgado por el movimiento Periodismo Necesario al ministro de Interior y Justicia Miguel Rodríguez Torres.
“Vemos con preocupación que una vez más organizaciones vinculadas al gobierno, como es el caso de Periodismo Necesario, entreguen reconocimientos a personas que no son periodistas ni ejercen la carrera de comunicación social como es el caso del ministro Rodríguez Torres”, señaló Tinedo Guía, presidente del ente gremial.
Además, el representante nacional del CNP destacó que la comunicación social es una carrera que se estudia en la universidad y que requiere de una preparación minuciosa en virtud de la responsabilidad que se cumple.
“Hay una diferencia muy grande entre reportar desde la objetividad y dar a conocer el punto de vista de un gobierno. La objetividad y la imparcialidad son características del periodismo ético, que es el que propugnamos en el CNP. Una fuente gubernamental como lo es Rodríguez Torres, por principio, nunca puede actuar como un periodista independiente. Por ende, este premio tergiversa y manipula el concepto de lo que es la profesión y sus principios”, opina Tinedo Guía en nombre de la junta directiva del CNP.
Por otra parte Guía se refirió a los méritos que debe cumplir quien recibe un premio de periodismo, “la información para que sea veraz debe recoger los diferentes puntos de vista, no solo la versión de una parcialidad” . Aunado a ello el presidente del CNP cuestionó:
“¿Cómo se otorga un premio a la veracidad a un funcionario que no ha informado aún al país quién o quiénes secuestraron a la periodista Nairobi Pinto, por ejemplo”, haciendo alusión al rapto de la trabajadora de Globovisión perpetrado el pasado 6 de abril del presente año.
La junta directiva del CNP recordó que el Código de Ética del Periodista Venezolano advierte que los periodistas agremiados solo pueden aceptar premios que estén conformes con la normativa del CNP, único ente gremial facultado por ley para avalar galardones en el área.
Asimismo, el CNP hizo un llamado al cumplimiento de la ley del Ejercicio del Periodismo, en particular a aquellas gobernaciones y alcaldías del país que han obviado los requisitos del título profesional y la colegiación como elementos imprescindibles para reconocer la labor periodística, lo que las pone en el ámbito de la ilegalidad.
Igualmente elevaron un llamado de atención por el otorgamiento de premios de periodismo a figuras que a lo interno de las mesas de redacción ejercen la censura en contra de sus propios equipos reporteriles, como fue el caso del director de Últimas Noticias y a su vez expresidente del CNP, Eleazar Díaz Rangel, quien admitió haber censurado a la colega Laura Weffer.
El carácter parcializado del premio Nacional de Periodismo Simón Bolívar entregado a Díaz Rangel se demuestra en las palabras de Esther Quiaro, miembro del jurado, quien al anunciar el premio destacó: “Ese es periodismo que quisiéramos que se hiciera”. Quiaro es miembro además de Periodismo Necesario y en su cuenta de Twitter se define como “periodista y chavista, más que chavista que nunca! (sic) “.
Para finalizar el Colegio Nacional de Periodistas exaltó la importancia de esta profesión para el fortalecimiento de la democracia como sistema de gobierno que ampara a los diversos sectores que integran una nación y no sólo a los factores afines a un gobierno, puesto que el trabajo periodístico se debe al colectivo y no tiene como objetivo halagar a los funcionarios públicos, sólo por el hecho de serlo.