Muchos de los alumnos han comenzado a aplicar una nueva forma de vida y de estudio dentro de sus respectivos planteles, además de que con los conocimientos adquiridos ayudan a las comunidades a mantener sus espacios y conservar las áreas verdes
Los distintos estudiantes de los diferentes planteles pertenecientes a la Gobernación de Miranda han ido desarrollando diversos proyectos, dentro de sus respectivos lugares educativos, en los cuales se han enfocado en el área de reciclaje y ecología en donde no sólo han creado nuevos espacios para el estudio y la recreación, sino que además han recuperado, mantenido y conservado sectores de algunas comunidades aledañas a los planteles.
La creación de obras de arte, títeres, regalos, así como también reforestación y apertura de nuevos espacios para el disfrute familiar ha ido formando parte esencial en el desarrollo de los niños, quienes cada día más se muestran interesados en el tema de crear cosas nuevas con materiales de desechos, según aseguran algunas maestras quienes encabezan esta nueva forma de vida.
Creando y aprendiendo
Entre las tantas escuelas que han llenado sus espacios con materiales que pueden ser reusados, se encuentra la Unidad Educativa Estadal José Manuel Siso Martínez, en donde gracias al programa “Mejorando el Ambiente de Aprendizaje” creado por el Gobierno regional, hicieron posible la apertura de una nueva aula en donde los pequeños estudiantes han ido mejorando, enriqueciéndose y recreándose con objetos ecológicos y reciclables.
“Cada docente ve que espacio puede mejorar o crear, en nuestro caso pudimos aperturar el aula de experimentar y descubrir que ante son existía. Aquí nuestros niños trabajan con tierra, arena, plantas y realizan objetos variados con materiales de desecho”, manifestó Meliza Ramírez, profesora de preescolar “A” de la U.E.E. Siso Martínez.
El salón pareciera tener vida propia, ya que sus estantes y paredes están rebozadas de maravillosas piezas de arte creadas por los niños del recinto escolar, piezas en donde los más pequeños dan a conocer su amplia imaginación y demuestran lo que con esfuerzo pueden crear.
“Utilizamos las bandejas en donde vienen el jamón y el queso como lienzo para crear pequeñas pinturas con paisajes, las cuales además quedan bellísimas”, dijo Ramírez.
Asimismo, los envases de bebidas como refrescos y agua han sido convertidos en pequeñas bomboneras y monederos que fueron obsequiados a las madres durante su día.
“Nuestro proyecto pasado fue reciclando mejoramos nuestro planeta, en donde realizamos charlas, exposiciones y trajimos muchos materiales reciclables como tapas, chapas, pitillos que luego utilizamos para otras actividades”, afirmó Ramírez.
Sumado a ello, los estudiantes han adornado algunas áreas del plantel con flores creadas con envases plásticos y CDS, así como también con esculturas y títeres cuyos principales materiales son rollos de papel higiénico y cartón.
Como parte de esta nueva iniciativa, las maestras han creado un gran libro lleno de ilustraciones formadas con tela, granos y demás materiales para que los niños puedan experimentar a través del tacto y así aprender de una manera diferente y eficaz.
Ayudando
a las comunidades
Por otra parte, otros planteles como es el caso de la Unidad Educativa Estadal Anita Espinal, de la comunidad El Barbecho, ha realizado un trabajo de recuperación de espacios mediante la reforestación de una zona que era anteriormente utilizada como vertedero de desechos por los vecinos de la zona, trabajo desarrollado mancomunadamente con el Instituto Radiofónico Fe y Alegría (IRFA).
“Trabajamos con los de Fe y Alegría quienes utilizan este espacio los días sábados y así ellos realizaron su labor social. Nosotros conseguimos las plantas, el abono y la tierra y logramos rescatar este espacio”, declaró Marle Castillo, directora encargada del Anita Espinal.
Dicho proyecto surgió a raíz de una problemática que existía con un vertedero de basura en la calle Acueducto de El Barbecho, el cual afectaba a todos. Una profesora de 4to grado tuvo la inquietud de hacer algo para evitar que las personas dejaran sus desechos en el lugar, ya que su proyecto para la fecha hablaba sobre las plantas, por lo que comenzó a organizar y recolectar los materiales.
“Las plantas fueron donadas por el Ministerio de Ambiente, igualmente se le solicitó a un vivero la tierra y el abono”.
Al menos 15 metros fueron recuperados con un total de 12 árboles, trabajo que se llevó a cabo no hace más de dos meses y que se ha mantenido hasta los momentos.
Ronald Gil