Este viernes, durante un encuentro con emprendedores de Guatire, denominado “Hecho en Miranda”, el gobernador de la entidad, Henrique Capriles, afirmó que el modelo económico que aplica el Gobierno central ha llevado al país a la debacle.
“Esta grave crisis no se resuelve cambiando ministros de aquí para allá, ese no es el problema. El verdadero problema es que el Gobierno acabó con la producción nacional y ahora todo es importado. Venezuela padece de inflación, escasez y desabastecimiento. Las colas en Venezuela para comprar cualquier rubro son el ejemplo de que las cosas no funcionan. Este modelo económico que pretenden imponer por la fuerza no funciona y también es causante que tengamos más de 6 millones de venezolanos desempleados o en la economía informal”.
Capriles dijo que sólo Venezuela y Cuba son los únicos países de América Latina que defienden un modelo económico decadente. “Este Gobierno destruyó la industria nacional y el parque industrial. Hoy en día las empresas utilizan sus galpones para guardar mercancía que se trae de otros países, mientras acá miles de empleos se han perdido. Otros países en América Latina han logrado descender los índices de inflación y han incrementado la generación de empleo. Por eso seguimos diciendo que el modelo que tenemos en Venezuela tiene que cambiar para llegue el progreso”.
“¿Cómo no le va a ir bien a un país que desarrolle sus capacidades? Hay que ser fanático del desarrollo de Venezuela, del talento nacional, esto no se trata de partidos ni carnets políticos, este es un país que tiene recursos por donde usted se meta, aquí nos hemos acostumbrado a exportar sólo petróleo, antes exportábamos café, ahora todo lo traemos de afuera. El 70% de lo que hoy se consume en Venezuela es importado y si no hay divisas, no se importa, y si no se importa hay escasez”.
El Gobernador de Miranda sostuvo que la única forma de lograr los cambios depende de un esfuerzo conjunto entre los sectores privado y público. “En el modelo que nosotros proponemos, es aquel en el que la gente gane bien, coma bien y duerma bien. Creemos en un modelo en el que el Estado lejos de amenazar a los empresarios, incentive la producción”.