Entre los dos pilotos de Mercedes terminó el finlandés de Williams Valtteri Bottas, mientras que el vigente campeón del mundo, el alemán Sebastian Vettel, fue cuarto y el español Fernando Alonso acabó en la quinta posición.
Esta es la cuarta victoria del año para Rosberg que suma 190 puntos en el campeonato, 14 más que Hamilton.
«Han ocurrido muchas cosas buenas en las últimas semanas», dijo Rosberg de 29 años.
En los últimos días se ha casado, ha visto a la selección alemana ganar el Mundial de fútbol (este domingo estaba en el garaje de Mercedes el futbolista de la Mannschaft Lukas Podolski) y ha ampliado su contrato con Mercedes.
Por su parte, Bottas, de 24 años, subió al podio por tercera vez consecutiva tras su tercer puesto en Austria y su segunda posición en Silverstone.
El finlandés es quinto en el Mundial a seis puntos de Alonso, cuarto.
El Gran Premio empezó con un gran susto debido a un espectacular accidente en la primera curva protagonizado por el brasileño Felipe Massa (Williams), que salía tercero, y el danés Kevin Magnussen (McLaren), que salía cuarto.
Magnussen intentaba adelantar a Massa por el interior de la curva, cuando el brasileño cambió de dirección cerrando el paso y chocando con el McLaren.
El Williams dio una vuelta de campana y se quedó parado, boca arriba, en la escapatoria de la curva mientras que Magnussen pudo continuar.
Pero, ni ver un coche volteado recorriendo la pista desconcentró a Rosberg.
El hijo de Keke, campeón del mundo en 1982, ha dominado de principio a fin un Gran Premio alemán que nunca le había traído suerte. Nico jamas había subido al podio en casa.
Su victoria ha sido inapelable, delante de miles de espectadores alemanes que asistieron a la carrera pese a la incertidumbre meteorológica y concluyendo un fin de semana casi perfecto para el líder del Mundial.
Pero, la victoria completa de Rosberg no ensombrece la actuación de su compañero Hamilton.
El británico dio un festival de adelantamiento y limitó las consecuencias de su grave accidente del sábado en la primera sesión de clasificación y que, tras ser sancionado por cambiar la caja de cambios, le hizo salir desde la 20ª posición de la parrilla de largada.
Siete monoplazas con motor Mercedes terminaron entre los diez primeros de la prueba, incluido el Force India del mexicano Sergio Pérez (10º).
Gracias a la segunda plaza de Bottas, Williams, una de las escuderías con motor Mercedes, se colocó en el podio del Mundial de constructores detrás de Mercedes (1º) y Red Bull (2º) y por delante de Ferrari (4º).
El otro mexicano, Esteban Gutiérrez (Sauber), fue 14º, mientras que el venezolano Pastor Maldonado (Lotus) fue 12º.
Entre los dos pilotos de Mercedes terminó el finlandés de Williams Valtteri Bottas, mientras que el vigente campeón del mundo, el alemán Sebastian Vettel, fue cuarto y el español Fernando Alonso acabó en la quinta posición.
Esta es la cuarta victoria del año para Rosberg que suma 190 puntos en el campeonato, 14 más que Hamilton.
«Han ocurrido muchas cosas buenas en las últimas semanas», dijo Rosberg de 29 años.
En los últimos días se ha casado, ha visto a la selección alemana ganar el Mundial de fútbol (este domingo estaba en el garaje de Mercedes el futbolista de la Mannschaft Lukas Podolski) y ha ampliado su contrato con Mercedes.
Por su parte, Bottas, de 24 años, subió al podio por tercera vez consecutiva tras su tercer puesto en Austria y su segunda posición en Silverstone.
El finlandés es quinto en el Mundial a seis puntos de Alonso, cuarto.
El Gran Premio empezó con un gran susto debido a un espectacular accidente en la primera curva protagonizado por el brasileño Felipe Massa (Williams), que salía tercero, y el danés Kevin Magnussen (McLaren), que salía cuarto.
Magnussen intentaba adelantar a Massa por el interior de la curva, cuando el brasileño cambió de dirección cerrando el paso y chocando con el McLaren.
El Williams dio una vuelta de campana y se quedó parado, boca arriba, en la escapatoria de la curva mientras que Magnussen pudo continuar.
Pero, ni ver un coche volteado recorriendo la pista desconcentró a Rosberg.
El hijo de Keke, campeón del mundo en 1982, ha dominado de principio a fin un Gran Premio alemán que nunca le había traído suerte. Nico jamas había subido al podio en casa.
Su victoria ha sido inapelable, delante de miles de espectadores alemanes que asistieron a la carrera pese a la incertidumbre meteorológica y concluyendo un fin de semana casi perfecto para el líder del Mundial.
Pero, la victoria completa de Rosberg no ensombrece la actuación de su compañero Hamilton.
El británico dio un festival de adelantamiento y limitó las consecuencias de su grave accidente del sábado en la primera sesión de clasificación y que, tras ser sancionado por cambiar la caja de cambios, le hizo salir desde la 20ª posición de la parrilla de largada.
Siete monoplazas con motor Mercedes terminaron entre los diez primeros de la prueba, incluido el Force India del mexicano Sergio Pérez (10º).
Gracias a la segunda plaza de Bottas, Williams, una de las escuderías con motor Mercedes, se colocó en el podio del Mundial de constructores detrás de Mercedes (1º) y Red Bull (2º) y por delante de Ferrari (4º).
El otro mexicano, Esteban Gutiérrez (Sauber), fue 14º, mientras que el venezolano Pastor Maldonado (Lotus) fue 12º.