El diputado a la Asamblea Nacional por el estado Táchira, Abelardo Díaz, calificó como una “humillación más para el pueblo”, la decisión del gobierno nacional de implementar en los supermercados del país un sistema biométrico (capta huellas) para controlar la venta de alimentos.
“Este anuncio del presidente Maduro refleja el desespero del gobierno por montar una pantalla más para distraer la atención de los venezolanos, como una estrategia dirigida a mostrarse ante el país como un presidente que lucha contra el desabastecimiento y el contrabando, como consecuencia de la pésima valoración de su gestión en las encuestas, incluyendo a las encuestadoras cercanas al gobierno como el caso de Hinterlaces”.
A juicio del parlamentario copeyano, esta es una pésima estrategia, ya que traslada una vez más al pueblo los sacrificios, los controles y las restricciones, que terminan teniendo su origen en la ineficiencia del gobierno a la hora de acabar con la producción interna y en la desbastadora corrupción a través de Cadivi, “que permitió que por años se robaran descaradamente los dólares preferenciales destinados a la importación de alimentos y productos de primera necesidad”.
“Los únicos beneficiados con la implementación de este sistema biométrico serán los enchufados rojos que importarán los capta huellas y harán un negocio redondo, pero para el pueblo sólo quedará el tratamiento humillante y los racionamientos propios de países hundidos en el sub desarrollo y con economías en quiebra como Cuba”.