La madrugada de ayer comisiones mixtas de la División contra Robos y el BAE del Cicpc, llegaron a la residencia Los Gabanes, en la carretera Los Dos Caminos, vía Sotillo, en Higuerote, donde permanecían los presuntos delincuentes
En un enfrentamiento con funcionarios de la División contra Robos del Cicpc, fueron abatidos en Higuerote, estado Miranda, dos presuntos delincuentes que estaban siendo requeridos en las investigaciones que se siguen por el secuestro y lesiones que sufrió el médico otorrino de la clínica La Floresta, Aderito de Sousa Fontes, el pasado 21 de julio.
Los funcionarios de ese despacho venían haciendo seguimiento a la banda delictiva. En algún momento manejaron información acerca de que algunos de sus miembros habían huido hacia la urbanización Los Naranjos, en Guarenas, pero luego se desplazaron hacia Higuerote.
La madrugada de ayer comisiones mixtas de la División contra Robos y el BAE del Cicpc, llegaron a la residencia Los Gabanes, en la carretera Los Dos Caminos, vía Sotillo, en Higuerote, donde permanecían los presuntos delincuentes. Los sujetos respondieron a tiros y se produjo el intercambio de disparos que dejó saldo de dos fallecidos.
Los abatidos fueron identificados como Manuel José Fernández Baratta, de 25 años y Alexis Frederick Morales Guía., ambos con registros policiales por diversos delitos. El Cicpc decomisó en el sitio una pistola Glock modelo 19, calibre 9 milímetros con cargador de 32 municiones.
Fueron sometidos
El médico Aderito de Susa y su esposa, fueron sometidos en el sector Lomas del Mirador, en Baruta, cuando salían de una residencia de su propiedad que estaban remodelando. Se los llevaron en su Toyota 4Runner placas AA893NC.
La pareja fue ruleteada por varias zonas de Caracas, luego la mujer fue llevada bajo amenaza de muerte hasta su domicilio en la calle San Benito, en La Castellana, donde robaron una elevada suma de dinero en euros, dólares, una laptop, seis Rolex, tres armas de fuego y otros objetos de valor.
En el apartamento alguien se percató de la situación alertó a la policía. Sin embargo, los sujetos huyeron con la mujer a la que dejaron abandonada en Turumo. Al médico, lo liberaron en la autopista Gran Mariscal de Ayacucho, frente al terminal.
Los secuestradores le dieron órdenes de correr, le dispararon en 10 oportunidades, pero solo cuatro de los tiros lo hirieron a la altura del abdomen. Fue recluido en la clínica La Floresta, donde recibió atención médica y aún se recupera.
AA
