El Ministerio Público (MP) logró privativa de libertad para Harry Anderson Echarry Narváez (24), quien fue detenido el 19 de agosto por presuntamente haberle inyectado biopolímeros a una joven de 22 años de edad, durante una intervención estética realizada en su residencia, ubicada en la parroquia Urimare del estado Vargas.
Las fiscales de la Sala de Flagrancia de esa jurisdicción, Liliana Guerra y Belitza Marcano, respectivamente, imputaron al hombre por presuntamente incurrir en los delitos de lesiones graves y comercialización de sustancias nocivas para la salud.
Tales delitos se encuentran previstos y sancionados en el Código Penal y la Ley Orgánica de Precios Justos.
La audiencia de presentación se llevó a cabo en el Tribunal 5º de Control de Vargas, instancia que a solicitud de las fiscales acordó la privativa de libertad para Echarry Narváez, quien se encuentra recluido en Internado Judicial San Juan de Los Morros, estado Guárico.
De acuerdo con la investigación, el 15 de julio de este año la joven denunció el hecho ante la Unidad de Atención a la Víctima del Ministerio Público en el estado Vargas, manifestando que Echarry le inyectó una sustancia para aumentar los glúteos y que actualmente se encuentra padeciendo un estado delicado de salud.
Tras varias diligencias de investigación coordinadas por el MP y ejecutadas por funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, el hombre fue aprehendido durante un allanamiento autorizado por el referido Tribunal.
Asimismo en el procedimiento fue incautado material médico quirúrgico, entre ellos: inyectadoras, gasas y sustancias cuyo uso no está permitido por el Ministerio del Poder popular para la Salud.
Es importante recordar que en Gaceta Oficial Nº 40.065 fue publicada la resolución mediante la cual se prohíbe el uso y aplicación de sustancias de relleno (biopolímeros, polímeros y afines) en tratamiento con fines estéticos.