Sobre la transformación del Estado y del gobierno, hoy no se sabe nada, pero lo delicado es que a estas alturas tenemos a todo un gabinete de ministros que puso su cargo a la orden y nadie después de días ha sido removido de su cargo
En estos días he recordado con mucha insistencia un tema de Billo´s Caracas Boys llamado «pasito tun tun» que dice así:
Si bailas de aquí pa´llá
Si bailas de allá pa´ca
enseguida tú verás
Pasito tun tun
Pasito tun tun
Pasito tun tun
Pasito tun tun
Pasito tun tun
Pasito tun tun
Pa´que todos bailen
Pa´que todos gocen
Algo que es muy nuevo
y nadie conoce.
Debo confesar con todo respeto que así me he sentido en este último mes y medio con los anuncios de gobierno.
Son varios los anuncios que recuerdo, entre ellos la transformación del Estado y del gobierno, ofrecido para el 15 de julio y después con prórroga para el 15 de agosto, el aumento de la gasolina, la posibilidad de la venta de Citgo, el anuncio del sacudón en el gobierno, la implementación del sistema biométrico, el llamado a la crítica como acción revolucionaria y la unificación cambiaria, y si chequemos los resultados de cada anuncio podríamos entonces entender porque me evoca a la vieja canción que escuchaba en las reuniones de mi familia: «Pasito tun tun», y como lo bailaban con «un pasito pa´ lante y otro pa´ tras».
Sobre la transformación del Estado y del gobierno, hoy no se sabe nada, pero lo delicado es que a estas alturas tenemos a todo un gabinete de ministros que puso su cargo a la orden y nadie después de días ha sido removido de su cargo. Sobre el aumento de la gasolina, después de convocar a un debate nacional sobre el tema, hoy la postura oficial sobre el asunto es que «no hay apuro», de igual forma sobre la venta de Citgo. En cuanto al anuncio sobre el sacudón en el gobierno, primero se dice que implica la remoción del tren ministerial y después se afirma que el asunto del sacudón está más vinculado a los niveles de eficiencia.
En cuanto al sistema biométrico, se dice que será la solución definitiva al problema del contrabando y del desabastecimiento, pero horas después se afirma que su aplicación será voluntaria. Por otra parte desde distintos escenarios políticos se aúpa la crítica y la autocrítica, pero después se afirma que ahora la crítica es una «moda», y por último se anuncia una unificación cambiaria con apoyo de entes internacionales que hacen una caja de resonancia favorable a la medida, y después se informa que la medida no goza de consenso y que se estudia un cambio dual.
Mi muy estimado camarada Maduro, aunque no estoy de acuerdo con algunas de las medidas anunciadas o su forma de implementación planteada, mi recomendación va más allá de eso: Usted es el presidente de la República, tome decisiones, bien pensadas, previamente consultadas e incluso legitimadas, y evite retrocesos que ponen en cuestionamiento la capacidad de tomar las mismas.
Si usted estimado Presidente Maduro se apoya realmente en el pueblo, no para recibir odas ni aplausos, sino, para trabajar con él, bajo el criterio que tanto el Presidente Chávez convocó: «mandar obedeciendo», le aseguro que no tendrá que escuchar a «expertos en opinión pública» que se enriquecen diciéndole que gire a la derecha. «El Golpe de Timón» es muy claro, es a la izquierda y con el pueblo. Dejemos de bailar el «pasito tun tun».
Nicmer Evans | Aporrea.org