Obama y sus 27 aliados reunidos en Gales también discutieron cómo enfrentar a los militantes de Estado Islámico
La OTAN demandó el jueves que Moscú retire sus tropas de Ucrania, mientras el presidente de Estados Unidos Barack Obama y sus aliados llevaban adelante una cumbre para tratar de reforzar las defensas contra Rusia en el escenario más complicado para Occidente desde la Guerra Fría.
Mientras los líderes discutían sanciones más duras contra Rusia por sus acciones en Ucrania, el Kremlin habló de un cese al fuego inminente en la revuelta de cinco meses de los separatistas prorrusos.
Los dichos de Rasmussen marcaron el tono de la reunión centrada en el mayor enfrentamiento entre Rusia y Occidente desde la caída del muro de Berlín y el colapso de la Unión Soviética.
El presidente ucraniano, Petro Poroshenko -cuyas fuerzas han sufrido contratiempos en el sur y este del país desde la semana pasada-, dijo a periodistas tras reunirse con Obama y con los líderes de Gran Bretaña, Francia, Alemania e Italia que ordenará un cese al fuego el viernes si se firma en Minsk un plan de paz propuesto, como se espera.
Obama y sus 27 aliados reunidos en Gales también discutieron cómo enfrentar a los militantes de Estado Islámico, que han capturado grandes extensiones de Irak y Siria, y sobre cómo estabilizar a Afganistán cuando las fuerzas de la OTAN abandonen el país a fin de año.
La Casa Blanca dijo que Obama y los líderes de Alemania, Francia, Gran Bretaña acordaron en los márgenes de la cumbre que Rusia debe afrontar «nuevos costos» por sus acciones.
El presidente de Francia, Francois Hollande, dijo que sanciones más duras de la Unión Europea, que serían adoptadas el viernes, dependerían de los eventos que se produzcan en las próximas horas.
El primer ministro británico, David Cameron -anfitrión de la cumbre-, dijo que las sanciones de Estados Unidos y la UE han tenido un impacto en la economía rusa y que la presión sobre Moscú se incrementaría si el Gobierno no reduce sus acciones militares, que calificó de inaceptables.
Altos líderes de los rebeldes dijeron que ellos también ordenarán un cese al fuego si se llega a acuerdos en las conversaciones de la capital de Bielorrusia.
Sin embargo, los enfrentamientos continuaban el jueves cerca del puerto estratégico de Mariupol, a medio camino entre Crimea y Rusia.
Reuters