Tras los señalamientos del presidente, Nicolás Maduro, en contra de la Iglesia Católica por sus críticas al “Chávez Nuestro”, el arzobispo de Mérida, monseñor Baltazar Porras, dijo que en el Episcopado no existen odios para nadie. Aclaró que han insistido en el llamado al diálogo porque implica el respeto y la aceptación de los demás.
Manifestó que no solo la Iglesia Católica, sino también cualquier persona respetuosa de las creencias de los demás condenan la versión del Padre nuestro dedicada el presidente fallecido, Hugo Chávez.
“Esto es una burla y no es nada nuevo; uno de los comportamientos a lo largo de todos estos quince años es querer no solo apropiarse del lenguaje religioso, sino convertirlo en un arma para atornillar los principios y valores de la revolución quiere imponer como una especie de religión laica”, expresó.
En entrevista a Unión Radio, el ex primer vicepresidente de la Conferencia Episcopal Venezolana, cuestionó el escenario en que se presenta la versión. “Se presenta en medio de una población que está a la espera de soluciones de sus muchos problemas que son angustiantes y que tienen que ver con la seguridad, el abastecimiento y con la igualdad de unos y otros”, lamentó.