Esa nueva forma de poder adquirir los alimentos, aunque estos sean solo los regulados, puede conducir a más hambre y miseria a nuestro pueblo y eso es un grave detonante ya que un pueblo con hambre y arrecho jamás podrá ser detenido
El uso del sistema biométrico, aunque sea en las fronteras venezolanas, equivale al número con el que los nazis marcaban a los judíos para que siempre estuvieran descubiertos y señalados como judíos, o sea, simplemente execrados de la sociedad.
Es inaceptable hacer una diferencia o realizar un implantación de un régimen en el que los venezolanos no podamos comprar, con nuestro dinero, lo que nos dé la gana ya que el mismo nos pertenece y lo hemos ganado trabajando -por supuesto, aquí no están incluidos los sospechosos corruptos del régimen que han amasado grandes fortunas a costilla del pueblo venezolano-. Esa aseveración de decir que su fin es la de acabar con el contrabando es otra gran mentira del régimen, estamos seguros que más fácil y sencillo sería buscar entre los nuevos ricos de nuestra nación de donde proviene esa fortuna, decimos que es más fácil encontrar a esos nuevos ricos tomando en cuenta una frase que repetía constantemente el expresidente Carlos Andrés Pérez: “La tos y la riqueza no se pueden ocultar” y nuestras autoridades, presuntamente, saben quiénes han sido los nuevos ricos formados bajo su sombra.
La Tarjeta Biométrica solo perjudicará al pueblo, ya que estamos seguros que a ninguno de los altos funcionarios del régimen tendrán esa limitación para adquirir los alimentos de la dieta básica, creo que el estudio realizado para esa aplicación o la misma puesta en práctica de la cazahuella demuestra cómo el actual gobierno no entiende que las familias venezolanas no tienen un límite determinado de miembros y que hay familias que necesitan mayor cantidad de alimentos que otras, y debería ser aplicada una política más audaz para ayudar a nuestros productores y fabricantes a producir más y a la vez preparar un grupo de guardianes fronterizos que no se dejen sobornar por los contrabandistas, pero eso no lo piensan creen que es más fácil marcar al pueblo que ayudarlo a vivir mejor.
Venezolanos, debemos estar muy claro en lo que representa la Tarjeta Biométrica o el hecho de dejar marcada nuestras huellas para poder comprar los alimentos que necesitan nuestras familiares, este hecho tiene que ser repudiado por todos nosotros ya que no solo afecta a los miembros de la oposición democrática, si no que daña a todos y menos a los que no están enchufados en el gobierno.
Por otro lado, esa nueva forma de poder adquirir los alimentos, aunque estos sean solo los regulados, puede conducir a más hambre y miseria a nuestro pueblo y eso es un grave detonante ya que un pueblo con hambre y arrecho jamás podrá ser detenido, es por ello que piensen bien lo que están haciendo y después no digan que hay una guerra económica que es la que se está llevando los alimentos del pueblo. Ahora bien ¿Si un gobierno no es capaz de controlar el contrabando, como se puede llamarse gobierno?
Lo grave es que cada día, a pesar de lo que dice el actual régimen, hay más hambre, no hay medicinas fundamentales, no se consiguen viviendas para la clase media, no hay, cauchos baterías para automóviles, etc. y el venezolano no consigue, ni siquiera, cupos disponibles en los autobuses que viajan al interior del país ya que la mayoría esperan repuestos ¿Cómo va a ser posible que nos quieran clavar una tarjeta biométrica?
No aceptemos el trato que aplicaron los nazis y actuemos según nuestras leyes y constitución.
Salomón Benshimol R.
e-mail: sbenshimol@hotmail.com