El Gobierno de Venezuela evalúa y refuerza constantemente las medidas de seguridad para controlar el ingreso al territorio nacional de personas que provengan de países en los que se encuentre el virus del ébola, que a la fecha ha causado la muerte de 2.400 personas y ha infectado a otras 4.784 en África, y cuya aparición también ha sido notificada en España y Estados Unidos.
A propósito de ello, este martes la ministra para la Salud, Nancy Pérez, sostuvo una reunión con representantes de la Organización Mundial de la Salud (OMS), autoridades de Bolivariana de Puertos (Bolipuertos), así como epidemiólogos, entre otros, a fin de reforzar la vigilancia epidemiológica y ratificar que el país está al día con el protocolo a seguir.
«Estas reuniones tratan de afinar todo lo que tiene que ver con las medidas preventivas, de formación y de información a toda la población venezolana sobre este tema que ocupa a la comunidad internacional. Venezuela está al día con todo el protocolo y con todo el trabajo que se debe realizar en estos casos», indicó la titular del despacho para la Salud.
Recordó que desde el 8 de agosto del presente año el Ministerio para la Salud lleva a cabo este tipo de reuniones, luego de que la OMS declarara la enfermedad como una emergencia pública sanitaria internacional.
«El Gobierno nacional desarrolla reuniones permanentes de este tipo, en un plan de contingencia y acciones para dar respuesta oportuna, así como para contener el ingreso, con mecanismos monitoreados y vigilados por organismos internacionales como son la Organización Panamericana de la Salud y la Organización Mundial de la Salud», detalló Pérez, de acuerdo con un boletín de prensa.
Indicó que a todas las personas que provengan de las zonas mencionadas se les hace seguimiento para descartar que porten el referido virus.
El Ébola es una enfermedad viral, con una tasa de mortalidad de hasta 90 %. Los primeros síntomas de la afección incluyen la aparición repentina de fiebre, debilidad y dolores musculares, de cabeza y de garganta. Más tarde progresan a vómitos, diarrea, alteración de la función renal y hepática y hemorragia.
El virus se propaga a través del contacto con los órganos y fluidos corporales tales como sangre, saliva, orina y otras secreciones de las personas infectadas. Hasta la fecha, no tiene tratamiento específico ni vacuna.
AVN