Los jóvenes trataron de ocupar de nuevo un campamento que la policía había desmantelado pocas horas antes
Los manifestantes prodemocracia y la policía de Hong Kong protagonizaron este viernes nuevas escaramuzas en las calles de la ex colonia, lo que pone en peligro la reanudación del diálogo propuesta por el gobierno local a los estudiantes.
Los jóvenes trataron de ocupar de nuevo un campamento que la policía había desmantelado pocas horas antes.
El campamento, situado en el barrio densamente poblado de Mongkok, en la parte continental de Hong Kong, se encontraba prácticamente vacío cuando la policía lo desmanteló.
La policía utilizó gas pimienta y cachiporras para obligar a retroceder a los manifestantes que volvieron apresuradamente al lugar, que había sido ocupado durante caso tres semanas, presenció la AFP.
La violencia estalló alrededor de las 20H00 (12H00 GMT), cuando varios manifestantes trataron de atravesar a la fuerza el cordón policial alrededor del lugar donde estaba el campamento desmantelado.
La policía había advertido de que este campamento era el siguiente tras los desmantelamientos de las barricadas situadas en la isla principal, en Admiralty, cerca de la sede del poder, y en Causeway Bay, barrio muy comercial de la ex colonia británica apreciado por los chinos.
La víspera, el jefe del ejecutivo local, Leung Cheun-ying, entreabrió la puerta a unas discusiones con los estudiantes una semana después de que su gobierno anulara una primera cita.
Los jóvenes reclaman su dimisión y la instauración de un verdadero sufragio universal en el territorio autónomo, devuelto a China en 1997 y que vive su crisis política más grave desde ese momento.
AFP