Los ministros de Exteriores de la Unión, que se reúnen en Luxemburgo el próximo lunes, no tienen previsto abordar el tema de las sanciones a Rusia
Los presidentes de Rusia, Vladimir Putin, y Ucrania, Petro Poroshenko, escenificaron este viernes ante líderes de la Unión Europea (UE) un nuevo intento de aproximar posturas y relanzar el plan de paz para el este ucraniano, a pesar de que aún quedaron patentes las diferencias entre ellos.
Van Rompuy destacó que el “acuerdo general fue sobre la necesidad de avanzar en la implementación” de los acuerdos firmados el 5 de septiembre en Minsk entre el Gobierno ucraniano y los separatistas prorrusos del este del país, aunque reconoció que “hubo diferencias en varios aspectos”, por lo que serán “necesarias más reuniones” para abordar esas cuestiones.
Las trabas que persisten en las negociaciones fueron confirmadas por el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, quien admitió que las conversaciones “están siendo difíciles” y que “hay muchos desacuerdos y falta de entendimiento“, aunque “de todas formas, éstas continúan y tiene lugar un intercambio de opiniones”.
Los ministros de Exteriores de la Unión, que se reúnen en Luxemburgo el próximo lunes, no tienen previsto abordar el tema de las sanciones a Rusia ya que la revisión de esas medidas restrictivas está prevista para finales de octubre y “por ahora no hay motivos para hacerlo antes“, indicaron fuentes comunitarias.
La ministra italiana de Exteriores, Federica Mogherini, designada para convertirse en la próxima jefa de la diplomacia de la UE y que también participó en la reunión, consideró a través de la red social Twitter que tras la reunión hay un “nuevo compromiso con el plan de paz” y que “hay que seguir trabajando para su realización“.
EFE
