Es grosero y muy deplorable escuchar a un jefe de Estado acusar a sus adversarios de intentar inocular un virus en el país, cuando su responsabilidad radica precisamente en garantizar salud y vida a la población
Jorge Barroso *
Twitter: @Jorge Barrosod
Como si se tratara de un secreto de Estado, las cifras de muertes y casos por Chikungunya permanecen protegidas por el Gobierno nacional, por no decir silenciadas, cual información clasificada.
Se ha hecho tan sensible hablar del polémico virus, que el propio presidente Maduro advirtió que solo las autoridades de salud podrán referirse al síndrome febril. ¿Por qué el silencio oficial? ¿Quién pierde con este mutismo? ¿Los venezolanos sabemos a qué nos estamos enfrentando?
Ante la ausencia de una versión oficial que coincida con la realidad, hemos visto al gremio médico venezolano dar la cara por una situación que ellos mismos han calificado de “Epidemia”. ¡Epidemia señores! Los galenos hablan de más de 100 mil casos de Chikungunya, y de al menos 10 muertes por esta causa en el país. La situación es crítica, el Ejecutivo no informa ni actúa, y la comunidad médica venezolana está de manos atadas, y no precisamente por omisión, sino por prohibición.
Es grosero y muy deplorable escuchar a un jefe de Estado acusar a sus adversarios de intentar inocular un virus en el país, cuando su responsabilidad radica precisamente en garantizar salud y vida a la población. Si bien es cierto que alarmar no evitará nuevos casos, informar y actuar sí mitigará las consecuencias, y eso es lo que queremos señor presidente.
Queremos y necesitamos información. Queremos y necesitamos saber que hay un plan para protegernos de ese síndrome febril que nos mantiene en pánico. Actuemos, hagámoslo unidos. Controlemos la proliferación del vector, incrementemos las jornadas de fumigación contra el mosquito patas blancas, e informemos oportunamente al pueblo de los síntomas, las causas y cómo evitar el contagio.
Ocultando las estadísticas no recuperaremos las vidas perdidas. Siendo transparentes, sin duda alguna, sí podremos evitar más muertes. ¡Basta de amenazas, basta de censura! Merecemos un gobierno que nos hable claro. Seamos responsables, señor Presidente. El pueblo lo pide. Declare la emergencia sanitaria en Venezuela.
* Coordinador Nacional Primero Justicia Municipio Sucre