La imponente maniquí de color Jennifer Saa, fue muy popular y admirada por el público que sigue las incidencias del magno evento y para muchos debió haber obtenido una de las tres coronas. Su favoritismo fue contundente y llegó a oídos del “pitoniso de la belleza”, quien solo atinó a decir entre su círculo de allegados: “Aquí se está eligiendo a Miss Venezuela, no a Miss Angola”
El llamado “Zar de la belleza” no quiere dejar de crear polémica. Luego de haber coronado a capricho a Deborah Menicucci, como Miss Venezuela Mundo y hacer lo mismo con la reciente coronación de Mariana Jiménez cómo la soberana nacional, ahora vuelve a convertirse en noticia, por su lamentable opinión sobre las mujeres de color, específicamente de las venezolanas, a las cuales considera “feas”. El portal Aporrea elevó una dura crítica a Osmel Sousa, y al concurso Miss Venezuela, por los estereotipos de mujer que se enfilan entre las concursantes y sus dictatoriales criterios, donde el jurado es un simple adorno y parapeto. “Aquí el que sabe de concursos de belleza soy yo”, ha dicho sin un dejo de humildad, agregando a eso: “El jurado que elija las piernas más bellas, la sonrisa más linda y a mí que me dejen escoger a la ganadora”
El polémico artículo de Aporrea expone también por qué una mujer de color no llegará a ser jamás la soberana de la belleza del país. Además muestran un video en el que Sousa da declaraciones a un periodista, al que le confiesa que “la negritud venezolana no es bonita”, y que en cambio admira la belleza de las mujeres de color en Colombia.
¿Miss Angola o Miss Venezuela?
En la reciente edición de Miss Venezuela participaron dos imponentes negras, las cuales ambas quedaron en las finalistas. Miss Falcón, Jennifer Saa, y Miss Zulia, Érika Pinto, quien ya venía de participar en Miss Venezuela Mundo, ocupando el sitial de Primera Finalista. La imponente maniquí de color Jennifer Saa, fue muy popular y admirada por el público que sigue las incidencias del magno evento y para muchos debió haber obtenido una de las tres coronas. Su favoritismo fue contundente y llegó a oídos del “pitoniso de la belleza”, quien solo atinó a decir entre su círculo de allegados: “Aquí se está eligiendo a Miss Venezuela, no a Miss Angola”
El racismo no solo lo tiene Osmel. Para nadie es un secreto que en Venezuela existe racismo, y en el medio artístico y publicitario es notorio. En más de seis décadas del concurso, solo la hermosa Carolina Indriago ha obtenido la corona y por la abdicación de Elluz Peraza en 1976, la morena Judith Castillo, a quien se le exigió renunciara al trono, para darle paso a la segunda finalista. ¿Las razones? “No estás a la altura para representar a Venezuela y eres “niche”. Lo que vino después es ampliamente conocido, “la niche” fue a Miss Universo y quedó virreina universal. Posteriormente “la niche” se convirtió en unas de las más queridas y populares animadoras de la TV en la década de los 70 y 80. Algo similar pasó con la hermosa Norkys Batista, a quien se le “negreó” y no fue enviada a Miss Mundo, siendo ella una digna representante del estereotipo de nuestras hermosas morenas venezolanas. En su lugar fue la joven de alta sociedad y consentida de Osmel, Martina Thorogood, quien obtuvo el lugar de virreina. ¿Qué hubiese sucedido si hubiese ido Norkys? La incógnita quedó para siempre.
¡Qué contradictorio!
Al equipo que labora en la Quinta Miss Venezuela no le gustan las misses de color… ¡pero cómo les encanta un negro! ¿Contradictorio no?… A muchos se les vio con masajistas luego de “la noche más linda”, que continuó entre tragos y lujuria. Un miembro del jurado internacional y parte del equipo de la Quinta Rosada terminaron felices y los negros coronados, ya que aumentaron su cuenta bancaria. ¿Y el racismo? ¡Bien gracias!
Muerde aquí
Diego Kapeky
Twitter: @diegokapeky