El cuerpo de Ángel Cárdenas Quintero estaba sobre una silla con un tiro en el pecho, a un lado, su escopeta calibre 12 y las muletas con las que caminaba.
Al hombre de 78 años lo hallaron muerto dentro de la habitación donde residía en el barrio Los Estanques, parroquia Manuel Dagnino, de Maracaibo. Lo encontraron ayer a las 6:00 de la mañana.
“Un compañero de trabajo lo llamó y como no respondió, se saltó la cerca y vio el cadáver”, contó su compadre, Carlos Laguna.
La puerta de la habitación que está al fondo de la venta de pastelitos El Messie, propiedad de Cárdenas, estaba abierta. Los vecinos del sector aseguraron no escuchar ninguna detonación. Alegaron que Cárdenas, a quien le decían “El Messie” era un buen hombre y “no tenía problemas con nadie”.
Vía Panorama