Hay acciones que en vez de aclarar, oscurecen. Eso es lo que parece estar pasando con el caso de Robert Serra
Muy mal está quedando el gobierno con relación al caso de Robert Serra. La cantidad de incoherencias que han hecho decir al Presidente lo deja muy mal parado ante la opinión pública, consecuencias de ese afán de disfrazar la realidad tratando de vincular al hecho a Álvaro Uribe, el paramilitarismo colombiano y a la oposición, si disponer de elementos creíbles para una situación tan delicada que aún mantiene consternada a buena parte de los simpatizantes del gobierno.
Caso encangrejado
Tanto empeño por manipular lo acontecido puede terminar revirtiéndose en contra, hecho que no ocurrió con el asesinato del fiscal Danilo Anderson porque eran otros tiempos y además estaba al frente la figura magnánima de Hugo Chávez en pleno apogeo, pero la realidad es que hoy el caso sigue siendo un cangrejo que cayó en el olvido, a pesar de que por el mismo fueron inculpadas algunas personas a quienes jamás se les pudo comprobar nada.
Ahora, frente al lamentable episodio de Serra y a la matriz que se generó con su horrendo crimen las versiones ofrecidas han sido muy contradictorias, sin que hasta el momento se haya tenido la voluntad de aclarar bien los hechos en honor a la memoria del malogrado, de su familia y de los mismos partidarios del proceso.
Acusados sin pruebas
No se ha dicho la verdad a pesar de contar con todos los elementos de juicio a disposición, pero se ha preferido el atajo mas largo echándole la culpa a terceros.
De hecho el primer indiciado fue el diputado Berrizbetía a causa del muy usual juego de palabras que utilizan permanentemente los políticos en el parlamento.
Luego se oyó mencionar el nombre del joven Lorent Saleh y de allí la onda llegó hasta el objetivo puntual, Álvaro Uribe Vélez, un acérrimo adversario del gobierno venezolano.
Para ello hasta se buscó la vocería de un inmoral descalificado como Ernesto Samper, pero el mismo gobierno colombiano se encargó de aclarar la situación reaccionando con una airada nota de protesta por pretender asociar al país hermano con el clima de violencia que se vive en Venezuela.
Todo ello deja en entredicho la credibilidad del gobierno, sin tomar en cuenta otro hecho irregular, como lo fue el enfrentamiento entre colectivos y el CICPC.
La inconsistencia comienza cuando se anuncia que a los tres días de la muerte de Serra se tendrá el caso resuelto, pero han pasado casi dos meses enredados en su propia verdad y lo único oficial que se conoce son los videos difundidos en cadena nacional, los nombres de los supuestos indiciados y el anuncio de algunos detenidos que por cierto aún no han sido presentados públicamente.
Colombia desmonta el cuento
Esa manera de investigar un caso policial tan grave da pie para alimentar el rumor entre los ciudadanos de a pie.
Tras la captura del supuesto autor material en Colombia surge un nuevo episodio que tuvo otra respuesta contundente del gobierno colombiano.
Esta vez es el embajador Luis Eladio Pérez quien confirma que el llamado alias «El Colombia», es venezolano y que el hecho nada tiene que ver con el paramilitarismo, además de que afirma categóricamente que a Serra lo asesinaron sus escoltas.
Con ello el diplomático echa por tierra la premeditada intención de vincular la muerte de Serra con Uribe y el paramilitarismo, además de que cuesta creer una relación entre sus escoltas con estos agentes extranjeros.
Lo que no fue capaz de desmontar la oposición, lo está haciendo el gobierno colombiano, que por encima de las diferencias políticas que tiene con Uribe, privilegia la imagen del país, como debe ser.
Ante esta afirmación del embajador, que desde luego tiene el visto bueno de su país, al gobierno le toca aclarar los hechos, seguirlos enredando o apelar al insulto, que es una de sus características defensivas.
Lo grave es que se ha expuesto al presidente a asumir esta manipulación mediática para aclararle al país los hechos.
A veces a los conspicuos agentes del gobierno se les olvida que Maduro no es Chávez.
ARENA Y CAL
**** ALIRIO. Se me desgarra el alma cuando me toca despedir a un amigo que se nos va cuando aún tenía muchas crónicas sabrosas por escribir. La muerte de Alirio Bolívar me conmueve profundamente porque se trata de uno de esos estandartes que hoy escasean en el periodismo. Buena pluma, fino analista, plural, tolerante y por sobre toda las cosas, solidario, fueron algunas de las características de este colega que nos enseñó muchas cosas y para quien la política no fue obstáculo divisorio sino un vehículo de convivencia. Lo voy a extrañar y le pido a Dios por su descanso eterno.
**** SECRETO A VOCES. Se dice, se comenta, que el antejuicio de mérito para allanarle la inmunidad a Ismael García es un hecho y solo es cuestión de tiempo. Los casos de Juan Carlos Caldera y Carlos Ocariz se mantendrán «stand by» por ahora, pero listos para ser activados en cualquier momento.
**** MADURO. Consciente de cierta conjura interna que juega solapadamente al deterioro de su imagen, el presidente ha activado su aparato de propaganda para refrescarse con varias piezas bien estructuradas en diversos medios. La pelea, como dicen en criollo, es peleando.
**** BR. El TSJ restituye a las autoridades de Bandera Roja y les da plena posesión de su tarjeta y sus símbolos. Fue un acto de justicia porque no se concebía a este partido de la mano de cierto sector complaciente e identificado con el gobierno. Lo peor fue que algunos en la MUD accedieron a darle cabida al sector disidente a sabiendas de que se trataba de infiltrados del gobierno. Es decir, el adversario entró a la casa opositora y pudo constatar que el arsenal está desvencijado, por ahora.
A veces queda la sensación de que para algunos la política es un juego de monopolio, donde se pasa por «go»…y se cobran 200.
**** CONTRASTES del proceso de paz. Mientras en La Habana posan los líderes de la guerrilla y el gobierno colombiano, en el Arauca las Farc acribillan a 10 campesinos a mansalva. Cualquier parecido, es pura coincidencia.
**** EL COLEGA Jorge Collazo nos invita al bautizo de su libro sobre Oscar D’ León con quien trabajó y viajó durante casi dos décadas. Nadie más que Jorge para contar la verdadera personalidad del llamado “Sonero del Mundo”. Les adelanto que el texto trae revelaciones sorprendentes a las cuales hay darle todo el crédito. Jorge promete una segunda edición porque dice que se le quedaron muchos otros detalles en el tintero.
**** COMIENZAN a exteriorizarse los descontentos internos en El Universal. Los colega comienzan a sentir las presiones de la nueva directiva. Nada nuevo que no conozcamos. Por ahora resistir es una buena opción sin abandonar los espacios.
Jairo Cuba
Twitter: @jaircuba