El secretario general de la Confederación de Trabajadores de Venezuela, Manuel Cova, manifestó su preocupación por la reducción en los ingresos petroleros y prevé que la situación para los trabajadores será mucho más difícil para comprar los bienes y servicios que no produce el país.
“Este gobierno que se autocalifica de obrerista coloca a los trabajadores en circunstancias que ya estaban y están realmente difíciles cuando termina el 2014 con una inflación superior al 60% y el salario se volvió nada desde el punto de vista de su capacidad de compra”, planteó.
Cuestionó al gobierno en su política deliberada de destrucción del aparato productivo del país; por hacer mucho más dependientes a los venezolanos del Estado; y por dividir y debilitar al movimiento sindical.
“El Estado ha tenido cuantiosos recursos y un inmenso control que usa de manera inescrupulosa para dividir y multiplicar a los sindicatos y ha utilizado al Ministerio del Trabajo para desde allí estimular a una política de paralelismo sindical”, expresó en entrevista a Unión Radio.
Resaltó que el sector no se detendrá en el esfuerzo por la unidad de acción sindical y gremial. “Tenemos que reconocer que nuestras debilidades parten de la multiplicidad de organizaciones que tenemos y hay que hacer un esfuerzo supremo para encontrarnos”, agregó Cova.