Evitemos que el miedo gobierne

En lo personal, creo que los precios del petróleo no van bajar para siempre, recordemos que los mercados mundiales son como las burbujas, crecen, crecen, crecen hasta que explotan y luego se empiezan a llenar de nuevo

El año 2014 esta a punto de culminar, ocasión que es oportuna para hacer un balance y plantearse las perspectivas para el año siguiente. No pretendo jugar a ser futurólogo, pero si nos preparáramos bien para cualquier escenario económico y político, sin duda vamos a tener un 2015 mejor, puede ser incluso el punto del re-impulso y crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB).

¿Esto es posible con la caída de los precios del petróleo? Si, incluso creo que la circunstancia de la caída de los precios del petróleo es un factor positivo para detonar el dinamo de las capacidades productivas de nuestra economía. Eso si, estas perspectivas son solo posibles de cumplirse con un asterisco, en letras grandes y no a pie de página, si no a cabeza de página, que diga: si se hace lo que dice el librito.

En el 2014 se han hecho reuniones, diagnósticos, mesas de trabajos y se han creado nuevas instancias administrativas, pero no se han tomado medidas concretas que el país entero sabe que son necesarias. El 2015 debe ser el año de la concreción de un sistema cambiario realista, quizás sea mucho pedir unificado, pero al menos dual, y no cuatro tipos de cambio como existe actualmente. Igual se debe incrementar la asignación de divisas para insumos y materias primas para producir en Venezuela y disminuir las divisas destinadas a importar bienes terminados y no esenciales.

La gasolina es un tema extremadamente manoseado, argumentos a favor de su aumento. En el 2014 se dejaron de percibir, o mejor dicho ahorrar, entre 7 mil y 14 mil millones de dólares por no aumentarla, una platica que mucho hubiese servido para los hospitales y escuelas de este país.

Las tarifas eléctricas y del transporte público masivo provisto por el Estado deben sincerarse también, todo ello acompañado de planes de inversión para aumentar las capacidades de prestación de ambos servicios vitales para la sociedad y mejorar la calidad de los mismos.

El Gobierno Bolivariano ha dado pasos importantes en materia de ajuste de precio de alimentos, aunque sabemos que todavía hay productos en cola. Recordemos que la dilación de los necesarios incrementos en ciertos productos hace que cuando haya que ajustarlos, la proporción tenga que ser mayor, por lo tanto afecta más a la familia venezolana.

En lo personal, creo que los precios del petróleo no van bajar para siempre, recordemos que los mercados mundiales son como las burbujas, crecen, crecen, crecen hasta que explotan y luego se empiezan a llenar de nuevo. Eso, en cierto modo, es bueno para que la próxima bomba o burbuja no se llene de aire mas de la cuenta y se evite así el inminente estallido.

Por lo tanto creo que en el 2015, si se hacen las cosas bien, puede ser mejor de lo que esperamos. El miedo es libre, pero debemos evitar que nos gobierne, más aún cuando no están justificados. Un ajuste del tipo de cambio, por ejemplo, no tendría un impacto significativo cuando cualquier ciudadano de a pie sabe que en este país, el precio referencial del dólar que marca los precios, no es el 6,30 y ni el Sicad I, con las excepciones que sabemos.

 Miguel Pérez Abad

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