Quiero ser clara y honesta, por eso no podré estar en los eventos de Unbroken de los próximos días, ya que tengo varicela. Voy a estar en casa, con mucho picor y echando de menos a todo el mundo. No puedo creérmelo porque esta película significaba mucho para mí (…) pero así es la vida. Os envío a todos mi amor y espero que todo salga bien”. Con estas palabras que envió a través de un vídeo, Angelina Jolie anunciaba hace unos días que no iba a poder acudir a los actos de promoción de la película que dirige y produce debido a esta enfermedad.
Durante estas últimas semanas, la actriz ha viajado a Sydney, Londres y Berlín, sin embargo, anoche le tocaba el turno a Hollywood y su ausencia fue muy destacada. Sin embargo, Angelina no podría haber tenido mejores ‘representantes’, ya que en su lugar acudieron su marido, Brad Pitt, tres de sus hijos, Maddox, de 13 años, Pax, de 11, y Shiloh, de 8, y los padres del actor, Jane y William.
Es increíble lo rápido que están creciendo los hijos del matrimonio Jolie-Pitt, parece que fue ayer cuando eran tan sólo unos bebés. Pero ahora los mayores ya son todos unos ‘hombrecitos’ y los que vienen detrás llegan pisando fuerte e incluso presumiendo de un estilo propio y muy personal del que ya hemos hablado en otras ocasiones. En eso es experta Shiloh, quien anoche acaparó todas las miradas a su llegada al TCL Chinese Theatre.
Vestida igual que sus hermanos, con traje oscuro, camisa blanca y corbata negra, y el pelo hacia atrás con gomina, la niña demostró por qué con tan sólo ocho años consigue acaparar todos los flashes e incluso eclipsar a sus famosos papás. No cabe duda de que la primera hija natural del matrimonio tiene una fuerte personalidad y es por ello que no parece dispuesta a renunciar a su original estilo masculino.
En más de una ocasión Angelina ha hecho referencia a la forma de vestir de su hija: “Shiloh tiene un estilo de Montenegro. Le gusta vestirse como un chico. Quiere ser un chico, así que hemos tenido que cortarle el pelo. Piensa que es uno de sus hermanos”.
La actriz siempre se ha propuesto transmitir a sus hijas la idea de que forjen su propia personalidad. Deben estar orgullosas de sus logros y de haber sido capaces de hacer poco a poco su camino de forma independiente: “Cuando pienso en el futuro que les espera a mis hijas, solo deseo que nunca dejen de creer en sus posibilidades y que desarrollen su propio sentido de la individualidad, para que no caigan en modas estúpidas o permitan que los demás dicten la forma en que deben comportarse o actuar. Me gustaría que siempre estén orgullosas de lo que hayan vivido, ya sean experiencias positivas o vivencias no tan agradables. Creo que los jóvenes de hoy en día se encuentran en una situación complicada que a veces no les deja desarrollarse con libertad”. Eonline