El expresidente de Estados Unidos, George H. W. Bush, pasó una segunda noche ingresado en un hospital de Texas, luego de ser admitido por problemas respiratorios esta semana, informó el miércoles en la noche el portavoz de la familia, Jim McGrath.
“El presidente Bush tuvo un buen día y su pronóstico sigue siendo positivo”, dijo McGrath, en un comunicado difundido la noche del miércoles, en el que informó que el exmandatario pasó otra noche en el centro hospitalario Houston Methodist, como precaución.
“El expresidente, de 90 años, continuará en observación, por precaución”, señala el comunicado.
Bush, que fue el presidente número 41 de Estados Unidos (1989-1993), es el mayor de los exmandatarios estadounidenses que siguen vivos. En sus últimas apariciones públicas ha sido visto en silla de ruedas y su estado parece ser frágil.
Sin embargo, fue capaz de celebrar su cumpleaños en junio pasado, haciendo un salto asistido en paracaídas desde un helicóptero, cerca de la residencia familiar de Kennebunkport, Maine (noreste de EEUU).
Ese salto fue el octavo de Bush, siendo el primero el realizado el 2 de setiembre de 1944, cuando su avión fue derribado en el Pacífico, sobre la isla de Chi Chi Jima durante la Segunda guerra mundial.
En noviembre de 2012 ya había sido ingresado en el mismo centro hospitalario por una bronquitis, que lo mantuvo hospitalizado cerca de dos meses.
La esposa del expresidente, Barbara Bush, había sido admitida casi un año atrás a causa de una pneumonía, también en el hospital de Houston donde ahora él es tratado.
Republicano moderado, George H. W. Bush ocupó la Casa Blanca desde 1989 a 1993 y envió tropas a Irak en la primera guerra del Golfo, luego de que las fuerzas de Saddam Hussein invadieran Kuwait.
Antes de ser electo presidente, sirvió durante dos períodos como vicepresidente del líder republicano Ronald Reagan.EFE
