En tan solo unos días, cientos de agentes de Los Ángeles portarán cámaras de video cuando patrullen las calles como parte de un nuevo proyecto en medio de la polémica que vive el país por el uso de la fuerza policial.
A partir del primero de enero unos 700 miembros de policía de esa ciudad de California estarán equipados con una minicámara de video en sus uniformes como parte de un nuevo plan que pretende resolver disputas entre policías y testigos.
Las cámaras filmarán sus interacciones con los ciudadanos.
Las autoridades dicen que así se garantizará la transparencia en las acciones de los agentes en medio de la polémica en el país por el uso de la fuerza policial.
el alcalde de Los Ángeles, Eric Garcetti, se ha comprometido a comprar 7.000 cámaras individuales para todos los agentes el próximo año.
Garcetti espera que esta tecnología evite posibles casos de abuso o provea las pruebas necesarias para aclarar lo que ocurra en cualquier situación en la que esté envuelto el tercer mayor cuerpo de policía de Estados Unidos, después de los de Nueva York y Chicago.
En la mente de todos está el caso de Michael Brown, el joven negro desarmado que fue abatido por un agente blanco en Ferguson, Misssouri, en agosto.
Las versiones encontradas de lo ocurrido fueron decisivas para no inculpar al agente, lo que desencadenó hace unas semanas grandes protestas en todo el país.
Pero para algunos expertos no es suficiente con incorporar cámaras.
Actualmente otros cuerpos de policía en el sur de California tienen programas pilotos con cámaras individuales y esperan poder brindarles esta tecnología a sus agentes para demostrar más transparencia.CNN