Siria comenzó la aplazada destrucción de más de una decena de refugios subterráneos y hangares que eran utilizados para la producción y almacenamiento de armas químicas, dijeron el lunes a Reuters fuentes diplomáticas.
El año pasado Damasco entregó más de 1.300 toneladas métricas de agentes tóxicos tras sumarse a la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (Opaq), pero la destrucción de las instalaciones usadas está retrasada.
Las tareas en un primer túnel comenzaron el 24 de diciembre pero fueron retrasadas por tormentas de invierno. El sitio será sellado con muros de cemento para fines de enero, dijo una fuente en La Haya, donde tiene su sede el organismo de control de armas químicas.
“El trabajo al fin comenzó, lo que son buenas noticias”, dijo otra fuente. “Hubo algunos temas técnicos y el mal tiempo había retrasado el proceso”, agregó.
Siria se unió a la Opaq luego de que un ataque con gas sarín causó la muerte de más de 1.000 personas en el suburbio de Ghouta, en Damasco, el 21 de agosto del 2013, lo que generó amenazas de una intervención militar de Estados Unidos, que culpó por el incidente al Gobierno de Bashar al-Assad.
Vía Reuters