El presidente de la República llegó ayer a Riad para asistir a las exequias del Rey Abdalá ben Abdelaziz, quien falleció el pasado jueves a los 90 años. Regresará este lunes
El presidente de la República, Nicolás Maduro, arribó a Riad, Arabia Saudí, a las ocho de la mañana de ayer, hora de Venezuela, para asistir a las exequias del Rey Abdalá ben Abdelaziz, quien falleció el pasado jueves a los 90 años, y para tratar temas económicos binacionales. Maduro estuvo acompañado por la primera dama, Cilia Flores, y la Canciller de la República, Delcy Rodríguez, como parte de la delegación venezolana.
Maduro dijo el sábado que durante su visita al Reino de Arabia Saudita, efectuada durante el pasado 10 y 11 de enero, asistió al centro de salud donde se encontraba el Rey Abdullah, donde compartió con sus hijos.
El mandatadio nacional agregó que lleva palabras de condolencias y de respaldo a Salmab bin Abdelaziz, hermano de Abdalá, quien asumirá como nuevo rey saudita. El presidente también anunció que su visita durará solo 24 horas, y aprovechará también para tratar temas de intercambio binacional. Este lunes estará de regreso en Venezuela.
Abdalá ocupó el trono saudí desde 2005, luego del fallecimiento de su hermano y predecesor, el rey Fahd.
Condena al EI
El presidente Maduro condenó el aparente asesinato del rehén japonés Haruna Yukawa a manos del Estado Islámico (EI), así como al terrorismo «como recurso de lucha política, sea cual sea la causa en disputa»
Maduro dijo en un comunicado que condena «enérgicamente el funesto asesinato del ciudadano japonés Yukawa» y «al terrorismo en todas sus manifestaciones» y abogó, «una vez más, por el respeto a la vida y la tolerancia».
Por ello, Maduro añadió que ofrece «sus más sentidas condolencias al pueblo y al Gobierno japonés», que dio credibilidad al anuncio de la ejecución del rehén y aseguró que su prioridad ahora es liberar a otro ciudadano nipón en manos del grupo yihadista.
El pasado martes, la organización extremista publicó un vídeo con los dos rehenes en el que uno de sus combatientes daba un ultimátum a las autoridades japoneses para que pagaran un rescate de 200 millones de dólares.
En otra grabación difundida el sábado, el EI cambió sus demandas y pidió la excarcelación de la extremista Sayida al Rishawi, condenada a pena de muerte en Jordania.