El presidente de la principal patronal venezolana (Fedecámaras), Jorge Roig, afirmó hoy que el nuevo sistema cambiario anunciado por el Gobierno de Venezuela hace más de una semana, aún sin implementar, es «lo mejor que podría pasar».
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció hace una semana la modificación del sistema cambiario vigente en el país como parte de un conjunto de medidas que buscan destrabar la economía nacional en crisis en medio de la caída sostenida de los precios internacionales del petróleo.
Maduro anunció que mantendría un cambio subsidiario del dólar a 6,3 bolívares, al tiempo que conservará sólo uno de los dos Sistemas Complementarios de Administración de Divisas (SICAD), y que se crearía un tercer mercado del que no precisó mayores detalles.
Para Roig lo «más importante es lo que no dijo el presidente, y que si lo hacen bien pudiera funcionar» y es lo que tiene que ver con el nuevo SICAD y el nuevo tercer mercado que, según el presidente de Fedecamaras, se tratará «de una subasta a una tasa intermedia».
El empresario asegura que estos ajustes podrían «liberar el esquema cambiario para el resto de los actores económicos del país.
Roig opinó que aunque «no es el momento para desmontar el control de cambio», hay que ir avanzando en esa materia.
«Ojalá lo implementen bien, lo importante no es lo que anuncie sino cómo lo implementen, donde este Gobierno ha resultado particularmente torpe en implementar las medidas», añadió.
El control de cambio estatal que rige Venezuela en la actualidad registra tres cursos oficiales distintos, que oscilan entre los 6,30 bolívares por dólar, los alrededor de 12 bolívares por dólar del Sicad I y los 50 bolívares del Sicad II.
Estas tasas permanecen vigentes pese a que el Ejecutivo anunció los nuevos mecanismos hace más de una semana hasta que el Gobierno precise cuando será el momento de su implementación.
Vía EFE