El ejemplar de la denominada ‘Biblia de Gutenberg’ que se conserva en la Biblioteca de la Universidad de Sevilla, el primer libro que salió de la imprenta de tipos móviles inventada por Johannes Gutenberg, está siendo restaurado, para lo cual se ha efectuado un estudio químico y de rayos X de sus tintas.
El libro está siendo sometido a una limpieza superficial ya que su estado de conservación es aceptable, por lo que no ha sido desencuadernado ni se le suprimirán sus tapas, lo más deteriorado del ejemplar por el desgaste provocado por el uso y por su poca calidad, confeccionadas en el siglo XIX a base de papel, cartón y pergamino.
No obstante la «intervención mínima» a la que se le está sometiendo en el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico (IAPH) incluye injertos de papel japonés en las pérdidas de las páginas del papel confeccionado a mano por métodos artesanales que empleó Gutenberg, provocadas por xilófagos, y el retoque de algunas de las iluminaciones.
Aunque salido de la imprenta, los primeros ejemplares debidos al artilugio de Gutenberg se vendían «en rama», es decir sin encuadernar y sin tapas, y las páginas ya impresas eran decoradas o iluminadas a gusto de cada cliente como se hizo hasta ese momento con los manuscritos, sobre todo las letras capitales, los encabezamientos y los arranques de epígrafes y capítulos.
Algunas iluminaciones del ejemplar que se conserva en Sevilla están hechas con oro fino y con tintas de varios colores muy vivos que trazan filigranas de formas geométricas.
Los trabajados de restauración durarán algo más de dos meses y habrán concluido para marzo, según ha explicado a Efe la restauradora Mónica Santos, pero previamente se han estudiado doscientos puntos tomados de manera aleatoria para estudiar las tintas empleadas por Gutenberg, un estudio efectuado por la química del IAPH Auxiliadora Gómez. EFE