El grupo Venezolanos Perseguidos Políticos en el Exilio (Veppex) envió hoy una carta a cuatro congresistas estadounidenses en la que piden una audiencia en el Congreso para exponer la «violación de los derechos humanos, tortura y persecución» que sufre la «resistencia» en el país suramericano.
La carta está dirigida a los congresistas por Florida Ileana Ros-Lehtinen, Mario Díaz-Balart, Carlos Curbeo y Debbi Wasserman Shultz, y en ella solicitan a los legisladores su mediación para una audiencia en el Congreso a la que puedan asistir «organizaciones, activistas y líderes venezolanos».
El objetivo de esta audiencia es revelar en profundidad la situación crítica que atraviesa Venezuela, con el «encarcelamiento ilegal de jóvenes estudiantes y líderes políticos», así como el «empleo de la tortura» para acallar a la disidencia interna en el país, destacó Veppex en un comunicado.
«Venezuela se ha colocado al margen de la ley y del fuero internacional y expuesto a sus ciudadanos a un total estado de indefensión y vulnerabilidad», agregó la organización venezolana.
Se refirió a las sanciones impuestas por EE.UU. a altos cargos venezolanos considerados responsables de la violaciones de derechos humanos en ese país y, en ese contexto, el Veppex destacó la importancia de que «se conozca en detalle la participación de otros funcionarios en otras actividades delictivas».
Asimismo, alertó sobre la «gran afluencia de venezolanos a EE.UU. con fortunas cuantiosas producto de la corrupción».
El pasado 3 de febrero, el Veppex respondió a las amenazas vertidas contra ellos por el presidente de su país, Nicolás Maduro, y reiteró que Venezuela está regido por un «narcogobierno» que su mandatario «encubre» y «protege».
En una carta previa dirigida a los senadores estadounidenses Bob Menéndez y Marco Rubio, el Veppex había pedido que se considerara al venezolano como un «narcogobierno» por «patrocinar» y «estimular» el narcotráfico en la región.
La reacción de Maduro no se hizo esperar y poco después pidió identificar «con nombre y apellido» y difundir en cadena obligatoria de radio y televisión los rostros de los venezolanos que desde Miami piden que se declare al país un «narco-Estado». EFE