El filme polaco «Ida», ganador del Oscar a la mejor película extranjera, ha despertado gran entusiasmo en el mundo. Pero en su país ha suscitado polémicas, ya que muchos la consideran antipolaca.
La polémica tal vez era inevitable, dado que el filme de Pawel Pawlikowski explora la tensa interacción entre judíos, católicos y comunistas polacos durante y después del Holocausto, un período histórico que no ha sido analizado a fondo.
En la cinta, la joven Ida está a punto de tomar los votos de monja a principio de los años 60, pero descubre que es judía y sus padres fueron asesinados por un campesino polaco durante la Segunda Guerra Mundial.
Por cierto que muchos polacos celebran el éxito mundial de la película: el presidente y muchas personalidades de la cultura han dicho que su obtención del Oscar es una señal de renacimiento del cine polaco, que posee un rico historial.
Pero muchos polacos están ofendidos porque en la cinta no aparecen alemanes ni indicio alguno de que el país estaba ocupado por los nazis, que realizaban una campaña de exterminio de los judíos en toda Europa. También objetan que pone al desnudo el antisemitismo polaco sin mencionar a los polacos que arriesgaron sus vidas para socorrer a los judíos.
«El espectador de ‘Ida’ no se entera de la ocupación alemana de Polonia y sus leyes antijudías, solo ve que polacos mataron a judíos», escribió el publicista Michal Szuldrzynski en el diario Rzeczpospolita.
«Concedo que eso pudo suceder. Desgraciadamente hubo miles de casos de denuncias y asesinatos de judíos por sus vecinos polacos… Pero la verdad del siglo XX es de miles de polacos que salvaron a judíos y cientos de miles de católicos que murieron en campos de concentración, algo que a veces sorprende a la gente del exterior», dijo Szuldrzynski.
Jaroslaw Kaczynski, dirigente del partido nacionalista opositor Ley y Justicia, dijo el martes que «como polaco, me siento feliz por este éxito». Pero añadió que se sentiría «mucho más feliz» si se otorgara el Oscar a los polacos que ayudaron heroicamente a los judíos durante la guerra.
La Liga Antidifamación en Polonia, una organización judía que combate el antisemitismo, ha pedido a los realizadores de «Ida» que incluyan textos en la película para explicar que Polonia estuvo bajo la ocupación alemana de 1939 a 1945, que el exterminio de los judíos fue obra de alemanes y que los polacos sorprendidos ayudando a los judíos arriesgaban sus vidas y las de todas sus familias. La organización dice que ha reunido más de 50.000 firmas en apoyo a su petición.
Pawlikowski, el director, ha rechazado esas quejas y afirmado que su intención no era realizar una película histórica.
Algunas personalidades de izquierda acusan a la película de fomentar los estereotipos antijudíos con el personaje de la tía de Ida, una fiscal de la era estalinista que hizo condenar a muerte a varios polacos por oponerse al régimen comunista respaldado por Moscú que tomó el poder después de la guerra.
Esto tiene que ver con otro hecho histórico que afecta las relaciones entre judíos y cristianos: algunos judíos sobrevivientes del Holocausto apoyaron la imposición del régimen comunista de posguerra y estuvieron entre sus primeros dirigentes. Fiscales y jueces judíos presidieron procesos que culminaron con la ejecución de patriotas polacos que resistieron a los nazis y luego a los comunistas.
Judíos e historiadores polacos reconocen esta realidad, pero aseveran que la cifra de esos judíos es exagerada por los que la usan para justificar su antisemitismo. AP