Las Casitas se volcó a las calles para despedir a joven asesinado

 El cortejo fúnebre de Jeison Bermúdez (23), muerto a tiros en horas de la madrugada del sábado, fue acompañado por cientos de personas este lunes

Cientos de habitantes del barrio Las Casitas se volcaron a las calles este lunes para dar el último adiós al joven Jeison Bermúdez (23), asesinado de múltiples impactos de bala en horas de la madrugada del pasado sábado en la entrada a la calle 24 de Julio.
El cortejo fúnebre de Bermúdez salió de la calle 24 de Julio a eso de las 11 de la mañana de este lunes, acompañado de cientos de personas; pero además la gente del barrio tomó la calle y se apostó en las aceras para darle su último adiós.
Bermúdez era un joven universitario que residía en la calle 24 de Julio junto a toda su familia y, al decir de quienes lo conocían, no se metía con nadie. “El viernes en la noche estábamos disfrutando con unos amigos en una fiesta, y nos regresamos al barrio a eso de la tres-cuatro de la madrugada del sábado”, contó un amigo del finado. “Pagamos un taxi que nos dejó en la entrada del barrio; yo me quedé donde vivo, en la parte baja, cerca de la cancha, no quise a ir hasta su casa; él quería seguir compartiendo, pero yo quería dormir”, agregó. “Alguien nos alertó que andaban unos motorizados armados, que tuviéramos cuidado”, explicó. “Dicen que se topó con ellos y, como los vio armados, le dispararon a mansalva”, dijo. “A las pocas horas me despertaron para avisarme lo que había pasado”.
Al parecer, ya cerca de su casa, Bermúdez fue abordado por los motorizados que deambulaban por el barrio a esa hora (ya cerca de las cinco de la mañana). Nadie sabe cómo ni por qué, pero los antisociales decidieron quitarle la vida, le dispararon a corta distancia, sin razón alguna.
Según allegados a la familia, esos antisociales que asesinaron a Bermúdez pudieron haberse equivocado de persona, por cuanto el joven no se metía con nadie y tampoco tenía antecedentes penales.
De hecho, la manifestación del barrio este lunes es prueba de ello, fue elocuente. Su asesinato conmovió a todos; una gran cantidad de personas acompañó al cortejo fúnebre, muchos de ellos pidiendo justicia.
El cuerpo de Bermúdez amaneció tirado en el pavimento, cubierto por unas sábanas. Los funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc) se apersonaron al lugar ya cerca del mediodía del sábado para hacer el levantamiento del cadáver e iniciar las investigaciones de rigor.

Edward Sarmiento
esarmiento@diariolavoz.net
@edward42r

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