Desde hace dos meses se ha acentuado el problema del servicio en la zona, lo que ha obligado a los lugareños a adquirir el vital líquido a través de camiones cisternas u otras vías
Enardecidos, amanecieron ayer los habitantes del sector La Garza de La Veraniega en el municipio Tomás Lander por tener más de dos meses sin recibir por tuberías el servicio de agua potable. Los lugareños, con palos, ramas y cauchos, se apostaron en la carretera nacional Ocumare-Yare para impedir el paso vehicular en demanda del vital líquido.
La controlan los malandros
Los manifestantes, que permanecieron más de dos horas en la arteria vial, denunciaron que el problema radica en la manipulación de la llave de paso que distribuye el líquido en la zona.
“El control lo tienen los malandros y no le podemos reclamar porque nos matan o nos obligan a abandonar nuestras casas”, dijeron algunas de las manifestantes, quienes pidieron no revelar sus nombres. Las féminas les imploraron a los funcionarios de Hidrocapital y de la Guardia Nacional, que acudieron a la protesta, solventar esta situación.
Los afectados proponen que la llave de paso sea reubicada o en su defecto que sólo la empresa hidrológica tenga el control de la misma.
“Somos madres de familia con niños enfermos y personas mayores en nuestras casas y padecemos para tener un tobo de agua en nuestras casas”, expresaron.
La tranca generó cola en ambos sentidos de la vía. Algunos choferes tomaron atajos alternos. Los usuarios del transporte público hicieron transbordo, por lo que pagaron doble pasaje.
Por ahora…
Al lugar acudió una comisión de Hidrocapital. El representante de la empresa Estatal, Francisco Méndez, indicó que para el día de ayer y hoy sería habilitados cinco camiones cisternas para abastecer a la comunidad, “mientras que el miércoles vamos a revisar la situación planteada sobre la llave de paso y su posible sustitución”.
MIP-TUY Agencia/Jean Carlos Rodríguez
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