El obispo auxiliar de Caracas, monseñor Jesús González de Zárate, considera que la ola inmigratoria de venezolanos se debe abordar como “una realidad muy dolorosa».
«Que un venezolano sienta y afirme que no tiene futuro en su país, que sienta que ya no cabe en ese país es doloroso», aseguró en entrevista a Unión Radio.
En ese sentido Monseñor González enfatizó el llamado que realiza la iglesia a la renovación colectiva de la fe frente a la crisis.
“En la medida que nosotros pongamos nuestro corazón en Dios obtendremos las fuerzas necesarias para poder transformar las realidades que vivimos cada día y lograr la justicia, la verdad y basar nuestra fe en la reconstrucción profunda, este es nuestro llamado”.
González de Zárate explicó que el Papa Francisco conoce la situación de Venezuela. “Para que el Papa Francisco pueda visitar al país se debe esperar, pues su agenda está bien apretada y que él pueda venir sería satisfactorio para que el diálogo se propicie y que entendamos que todos somos necesarios para la búsqueda de la solución de los problemas”, concluyó.