Desde hace tres semanas el presidente de la República, Nicolás Maduro, está habilitado para dictar decretos de Rango, Valor y Fuerza en materia de defensa y soberanía.
La licencia extraordinaria fue otorgada al Mandatario por la Asamblea Nacional el pasado 15 de marzo, por un lapso de nueve meses. Es la segunda ley Habilitante que otorga al Presidente, esta vez como herramienta para enfrentar el decreto de Estados Unidos del 9 de marzo pasado, que declara a Venezuela como una “amenaza inusual”.
El instrumento —publicado en la Gaceta Extraordinaria 6.178, del 16 de marzo— establece en uno de sus cuatro artículos que el Jefe del Estado podrá dictar decretos y reformar leyes para la “protección del Pueblo y de todo el Estado frente a actuaciones de otros países o entes económicos o financieros transnacionales, o de factores internos, dirigidas a perturbar o distorsionar la producción, el comercio, el sistema socioeconómico o financiero”.
Sin embargo, 22 días después aún el Ejecutivo nacional no ha emitido la primera norma o decreto, en particular en materia económica, a pesar que de acuerdo con sondeos de opinión es la economía y la seguridad los dos temas que concentran la atención de los venezolanos y, según los expertos, debería ser el “focus” de este nuevo Poder Habilitante.
El analista político Jesús Silva, señala que “la Habilitante es una herramienta útil para atender los problemas económicos actuales porque es la materia determinante en este 2015”.
A su juicio, el presidente Maduro tendría una nueva oportunidad para concretar “legislaciones adaptadas a la realidad del país”, pero insiste que para lograrlo tendrá también que buscar “la concertación y el diálogo”.
“Las leyes que surjan a través de la Habilitante deberían debatirse de manera tripartita (trabajadores, gobierno, sectores productivos)”. “Que sean éstos los que hagan las críticas y aporten soluciones también”, opinó el docente.
Con información de Panorama del estado Zulia