Ante la contundencia de las pruebas presentadas por el Ministerio Público, fue condenado a 13 años de prisión César Enrique Serrano Vivas (25), quien admitió su responsabilidad en la muerte de un adolescente de 17 años de edad, ocurrida el 23 de junio de 2010, tras nueve meses de agonía en el hospital Victorino Santaella, ubicado en Los Teques, municipio Guaicaipuro del estado Miranda.
En la audiencia preliminar, la fiscal 12º de la referida jurisdicción, Mónica Brito, ratificó la acusación contra Serrano Vivas por el delito de homicidio calificado con alevosía, previsto y sancionado en el Código Penal.
Una vez que el acusado admitió los hechos, el Tribunal 6º de Control de Miranda dictó la condena de 13 años para el joven y ordenó su reclusión en el Centro Penitenciario de Aragua, con sede en Tocorón.
Por este caso, Antonio José Ramos (25), otro de los implicados en el hecho, irá a juicio oral y público.
En horas de la tarde del 10 de septiembre de 2009, la víctima transitaba por el barrio La Matica, sector Vuelta Larga de Los Teques, municipio Guaicaipuro del estado Miranda, donde fue interceptado por dos jóvenes que le dispararon con una escopeta para despojarlo de sus pertenencias.
Al quedar herido, el adolescente fue auxiliado por vecinos de la zona y trasladado al hospital Victorino Santaella. Allí recibió atención médica, pero el 23 de junio de 2010 falleció a causa de una hipertensión endocraniana.
Una vez iniciada la investigación, el Ministerio Público solicitó órdenes de captura contra César Enrique Serrano Vivas y Antonio José Ramos por su presunta participación en el hecho punible.
El 31 de julio de 2013, Ramos fue aprehendido por funcionarios de la Policía de Miranda en el sector Brisas de Oriente del municipio Carrizal, mientras que el 18 de noviembre de 2014 funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas detuvieron a Serrano Vivas en la avenida Bermúdez de Los Teques.