Se trata del mayor incremento entre los países que más gastan en defensa en el mundo, de acuerdo con el Instituto Internacional de Estudios para la Paz de Estocolmo.
El drástico aumento refleja la volátil situación de seguridad que se vive en el Medio Oriente. Arabia Saudita ha estado liderando una campaña militar contra los rebeldes chiitas en el país vecino de Yemen durante las últimas semanas.
Con sus arcas repletas gracias al alto precio del petróleo, Arabia Saudita invirtió 80.800 millones de dólares en su ejército el año pasado… la cuarta suma más alta del mundo. Eso representa mas del 10% del PIB saudí, una porción más grande que la de cualquier país, excepto Omán.
El gasto militar global se mantuvo estable en su mayoría el año pasado, pero el Medio Oriente y gran parte de África vieron fuertes aumentos, dijo Sam Perlo-Freeman, director de investigación de gastos militares en el Instituto de Estocolmo.
Estados Unidos recortó su gasto militar en un 6,5% en 2014 como parte de un plan para reducir el déficit presupuestario. El gasto militar en Estados Unidos se ha reducido en un 20% desde su nivel más alto en 2010, pero sigue siendo un 45% más alto que antes de los ataques terroristas del 11 de septiembre.
Estados Unidos sigue siendo el país que más gasta, por un amplio margen. El total que gastó en 2014 ascendió a 610.000 millones de dólares, casi tres veces el presupuesto de China de 216.000 millones. Eso representó un aumento del 9,7% respecto al año anterior.
Rusia es el tercero en la lista después de Estados Unidos y China. Su gasto fue de 84.500 millones de dólares en 2014, un incremento del 8,1% en solo un año.
Rusia tenía planificado hacer el aumento incluso antes del inicio de la crisis en Ucrania. Su plan de modernización militar a largo plazo tiene el objetivo de proporcionarle al 70% de las fuerzas armadas nuevo equipamiento para 2020.
Moscú apunta a obtener un crecimiento del 15% en 2015. El plan original era que hubiera un aumento incluso mayor, pero el gobierno se vio obligado a hacer recortes luego de que el colapso en los precios del petróleo ocurrido a finales del año pasado impulsara al país hacia una recesión.
El conflicto en Ucrania está obligando a otros países europeos a aumentar sus presupuestos militares.
El gasto en Europa del Este aumentó en un 8,4% en 2014, hasta llegar a los 93.900 millones de dólares. Polonia y Ucrania registraron los aumentos más altos. El instituto dijo que el gasto militar en Europa del Este se ha incrementado en un 98% desde 2005.