El funcionario Daniel Alejandro Serrano García, de 25 años, tiroteado por asaltantes en Caricuao, dejó huérfana a su hija de 5 años. El uniformado se convirtió en el policía 43 que muere a manos del hampa en La Gran Caracas desde enero, y el séptimo en apenas cinco días.
Un detenido que goza de un beneficio procesal participó en el asesinato del oficial agregado de la Policía de Chacao, Daniel Alejandro Serrano García (25) la noche del martes y regresó a su recinto a dormir tranquilamente con la moto y otras pertenencias de la víctima, pero fue ubicado porque el vehículo de dos ruedas tenía GPS.
Serrano salió de su guardia y se dirigía a su vivienda en Caricuao, cuando lo sorprendieron a la altura de Ruiz Pineda, le quitaron la moto, casco, pistola y otras pertenencias. Mal herido fue llevado al hospital Pérez Carreño, donde falleció.
El oficial dejó una hija de 5 años, se convirtió en el policía 43 que muere a manos del hampa en La Gran Caracas desde enero y el séptimo en apenas cinco días.
Llevaba puestos
los lentes del oficial
Los compañeros de Serrano ubicaron la moto en un centro para presos que gozan de régimen abierto ó destacamento de trabajo, donde duermen y salen de día supuestamente a laborar, ubicado en el sector Plaza Vieja, de Charallave, municipio Cristóbal Rojas, estado Miranda.
El centro pertenece al Ministerio Penitenciario, está bajo custodia de la GNB, y no permitieron la entrada de los funcionarios de Polichacao y de PoliMiranda que iban en busca de la moto que radiaban por transmisiones.
El presunto implicado, Wilber Alejandro Carrillo Martínez (28), procesado por robo agravado y asociación para delinquir, a la orden del Tribunal 5º de Ejecución de Caracas, llegó al recinto estacionó la moto de su víctima y entró a descansar. Llevaba puestos hasta los lentes del policía que acababa de matar.
Las autoridades indicaron que sería puesto a la orden de la Fiscalía. El cómplice también está identificado y lo buscan en Higuerote.
Inhuman en Barlovento
a la oficial de Polisucre
A las puertas de su humilde residencia, en El Guapo, estado Miranda, fueron velados los restos de la oficial de Polisucre Osmary del Valle Tavare Solani (27), asesinada el martes en Los Dos Caminos para robarle su pistola.
El entierro se llevó a cabo en el cementerio local, asistieron el alcalde Carlos Ocariz; el director de Polisucre, Manuel Furelos; el secretario de seguridad ciudadana Angel Alvarado; Gabriel D’Andrea, director de Protección Civil, la Brigada Ciclística en pleno y los estudiantes de la academia, para despedir a la funcionaria que tenía tres años y medio de servicio.
Osmary Tavare era la única hembra de una honesta familia mirandina. Frente a su casa colocaron un toldo blanco para realizar las exequias. Fue despedida con honores y ascendida post mortem al rango de oficial agregado.
Los funcionarios tuvieron que dividirse en dos grupos para poder asistir a los dos actos, pues al oficial Luís Cabrera, asesinado en la Autopista Regional del Centro el lunes fue sepultado en el cementerio Jardines del Cercando en Guarenas.
