La historia de Teddy Houlston conmueve al mundo. Este bebé británico vivió poco más de una hora y media, pero salvó una vida. Sus padres decidieron contar el caso para ayudar a otras familias en la misma situación y para incentivar la donación de órganos.
Teddy nació el año pasado y es el donante de órganos más joven en la historia del Reino Unido.
Jess Evans y Mike Houlston, sus padres, tenían una hija. En 2013, se enteraron de que estaban esperando mellizos, dos varones. Pero al poco tiempo, los médicos les informaron que uno de ellos sufría anencefalia y que, si el embarazo llegaba a término, no sobreviviría.
Los Houlston decidieron seguir adelante con el embarazo, sabiendo que Teddy no iba a vivir. Y, en paralelo, ofrecieron a los médicos donar sus órganos. En principio, la primera reacción de los profesionales fue negativa, porque el donante iba a ser extremadamente pequeño y no había antecedentes de una donación de este tipo exitosa. Pero, frente a la insistencia de los padres, accedieron.
Hace ya un año, nacieron los mellizos. Primero Noah y luego Teddy. El segundo bebé vivió exactamente 100 minutos. Pero fueron suficientes para que se pudieran donar sus riñones a otro paciente, cuya identidad y edad no trascendieron, pero los médicos informaron que es un adulto y que al día de hoy sigue con una evolución favorable.