¿Esto ya no es demasiado?
Las asistentes al Festival de cine de Cannes que optaron por ponerse zapato plano el pasado domingo para acudir al estreno de la película Carol, de Todd Haynes, se llevaron una desagradable sorpresa al llegar al Palacio de Festivales y Congresos y descubrir que no podían pisar la alfombra roja debido a su elección de calzado.
Al parecer, los selfies no son lo único que el certamen cinematográfico ha decidido prohibir en esta edición: los zapatos tipo bailarinas tampoco son bienvenidas sobre la alfombra roja, ni siquiera cuando la persona que las lleva sufre algún tipo de condición médica que le impide utilizar zapatos altos. Este era precisamente el caso de alguna de las mujeres a las que se le prohibió la entrada el pasado domingo, según informa el periódico especializado Screen Daily.
Una de las ‘víctimas’ de esta nueva norma ha sido la mujer del director Asif Kapadia, que la semana pasado presentó su documental ‘Amy’ sobre la cantante Amy Winehouse en el festival.
“Eso mismo le sucedió a mi mujer (al final la dejaron pasar)”, tuiteó Asif.
La noticia del uso obligatorio de tacones en Cannes ha levantado ampollas entre las estrellas femeninas que han acudido al festival. La actriz Emily Blunt ha sido una de las primeras en pronunciarse al respecto durante la rueda de prensa para presentar su nueva película Sicario.
“Para ser honesta, creo que todo el mundo debería ponerse zapatos planos ahora. No deberíamos llevar tacones. Todo esto resulta muy decepcionante, especialmente ahora que parecía que empezaban a llegar nuevas oleadas de igualdad”, afirmó Emily ante los periodistas, según recoge el periódico The Guardian.
Por su parte, el director del certamen, Thierry Frémaux, ha negado las acusaciones de sexismo que se están vertiendo contra el festival alegando que están basadas en “rumores infundados”.
“Los rumores que dicen que el uso de tacones sobre la alfombra roja es obligatorio para las mujeres en Cannes son infundados”, escribió Frémaux en su cuenta de Twitter.