Una medida antiviolación basada en un pene acoplado a un pantalón entre las mujeres tailandesas parece que está teniendo efecto, por lo menos mediático. El invento se llama Headmuns y es un pantalón con un pene en su interior para que el violador se lo piense antes de cometer la agresión.
Tailandia es uno de los países asiáticos donde más violaciones se producen y donde el Gobierno ha tomado medidas sin endurecer lo suficiente las penas. «En Tailandia se castiga con la pena de muerte a los culpables de delitos relacionados con el tráfico de drogas o de asesinato, pero no a los delincuentes sexuales. Ellos son sancionados con penas de prisión de entre 4 y 20 años.
La prótesis simula un pene erecto de tamañas dimensiones, pero fijas. Debería cambiar de grosor y longitud, de lo contrario el violador pensará que ha tomado excesiva Viagra o se ha puesto un paquete sospechoso y no es de Correos. Curiosamente Tailandia es un país con un alto índice de operaciones de cambio de sexo, por lo que esto le ayuda a la mujer a jugar al despiste.
Dicen que es extraño sentir un bulto tipo Calippo que no es tuyo mientras andas y te sientas con las piernas cruzadas; me lo creo. Lo bueno es que sirve de porra, que nunca está de más si se tiene que echar mano de ella en un momento de cabreo con el marido.
Muy raro todo. Parece más una campaña de marketing viral que una medida preventiva, pero si surte efecto bienvenidos sean los penes. NP